Gran expectación causó entre los locatarios la presencia fantasmal de una niña que se aparece durante la noche en el mercado San Juan en Pichucalco, donde, después de cavar un pozo para construir una cisterna, comenzaron a suceder cosas extrañas. Además de la aparición de la niña, testigos han manifestado que han escuchado lamentos, gritos y caídas de objetos sin que nadie las toque, sobre todo durante el cierre de los locales.
Aparición
Según testigos, una figura fantasmagórica ha comenzado a aparecer en el sitio, reviviendo la historia de un panteón que existía en el mismo lugar sobre el cual se construyó el mercado, hace más de 60 años.
Con el paso del tiempo, el camposanto fue cerrado y sobres sus cimientos construyeron el mercado donde aún se encontraron restos humanos.
De acuerdo a las versiones de los testigos, todo comenzó el pasado mes de agosto, ya que ante la necesidad de almacenar agua, se comenzó a construir una cisterna y fue ahí cuando comenzaron a aparecer los primeros testimonios de figuras fantasmagóricas de una niña que tiene una apariencia de seis años, la cual ha sido vista por las cámaras de seguridad de algunos locatarios en diferentes momentos de la noche, pero siempre cuando el mercado está completamente cerrado y no hay nadie en el lugar.
“La primera vez que la vi, estaba cerrando mi puesto en el mercado”, cuenta una vendedora de frutas y verduras que ha trabajado durante más de 20 años en este espacio.
“Era una figura alta y delgada, con un vestido blanco que parecía flotar en el aire, deambula por el área de comidas. Me dio mucho miedo, pero no pude dejar de mirarla”, dijo.
“La niña aparece cuando el mercado está vacío o no hay nadie en el lugar… es como si estuviera esperando a alguien o algo. La primera vez que la vi en la cámara de seguridad, pensé que era una niña que se había quedado atrás después de que el mercado cerrara, pero cuando la vi de nuevo la noche siguiente, me di cuenta de que era algo más”, señalaron quienes tienen las grabaciones.
Lamentos y gritos
Además de la aparición de la niña, testigos manifestaron escuchar lamentos y gritos en el mercado, especialmente durante la noche. Algunos han escuchado sonidos de pasos y susurros, mientras que otros han visto objetos caer al suelo sin que nadie los toque.“Es como si hubiera una presencia paranormal en este mercado”, dice una vendedora de ropa que ha trabajado durante 10 años en él. “He visto cosas caer al suelo sin que nadie las toque, y he escuchado lamentos y gritos durante la noche”, expuso.