Aprenden alumnos sobre monitoreo del agua

A fin de establecer nuevas técnicas de biología molecular que sirvan para catalogar la biodiversidad que existe en los diferentes cuerpos acuáticos de Chiapas, estudiantes del Tecnológico Nacional de México Campus Tuxtla Gutiérrez (TecNM/ITTG) participaron en el curso “Monitoreo Microbiológico Molecular de Cuerpos Acuáticos”.

Esta actividad estuvo a cargo de Rocío Alcántara Hernández, investigadora del Instituto de Geología de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), contando con la presencia de 27 estudiantes de distintas licenciaturas, maestrías y doctorados del instituto.

La investigadora destacó que, si bien los monitores comunes de coliformes y patógenos en el agua son muy importantes, es necesario utilizar nuevas herramientas de secuenciación masiva que surgieron en estas últimas décadas, ya que esto hace de la investigación mucho más relevante.

Lo que buscan es actualizar cómo conseguir la microbiota, porque eso les va a ayudar a establecer líneas de monitoreo para la contaminación de los cuerpos acuáticos que tengan, considerando que en Chiapas existe una gran biodiversidad en lagos, ríos, afluentes. Es vital compartir el conocimiento en este tema.

Durante el curso los estudiantes conocieron acerca de los microorganismos, por qué es importante muestrearlos, qué variables se deben considerar en un cuerpo de agua, cómo cambia con la estacionalidad, qué parámetros fisicoquímicos son los primeros que deben conocer (sobre todo en profundidades), la calidad de la muestra, cómo preservar el trabajo de campo, y después, qué es lo que pueden obtener y qué resultados establecer en el contexto del conocimiento.

“Es una actualización hacia las técnicas que podemos emplear para seguir monitoreando nuestros sistemas acuáticos, que se vuelven tan preciosos ahorita en el contexto de la sustentabilidad y el cambio climático”.

Esta actividad se realizó en colaboración con el doctor Víctor Manuel Ruiz Valdiviezo, docente e investigador del Tecnológico de Tuxtla Gutiérrez, con quien trabaja para el seguimiento de microrganismos en el lago del cráter “El Chichón”.