Mónica Martínez Ovando, bióloga y curadora de invertebrados del Zoológico “Miguel Álvarez del Toro”, llamó a la ciudadanía a hacer conciencia sobre la presencia de la araña violinista (Loxosceles Tehuana), pues debido a su estigmatización han sido incomprendidas.
“Simplemente ellas van a cumplir un ciclo en la naturaleza que va a ser el de alimentarse de los bichos como moscas, mosquitos, zancudos, cucarachas, algunos bichitos. Este ciclo en ellas es como controladoras biológicas”, reflexionó.
La bióloga agregó las características de la especie. Siendo una araña pequeña, de colores marrones, cuya presencia física puede caber perfectamente en una moneda de dos o de cinco pesos con las patas extendidas.
Por sus características físicas, es una araña que no hace tela. Por tanto, será raro verlas colgadas de los techos o descendiendo de un hilo de seda.
“Sus encimas pueden ocasionar un envenenamiento o intoxicación en el cuerpo humano. Denominado loxoscelismo, lo que podría mandar a una persona al hospital bajo cierta gravedad”, dijo.
Por último, la experta resaltó la nula agresividad de las especie y que sus mordeduras son realizadas de manera accidental y como método de defensa.
“Son de hábitos depredadores, se alimentan de insectos y otras arañas. Construyen pequeñas telarañas irregulares de aspecto algodonoso. Son de hábitos nocturnos y las encontramos en selvas, bajo rocas y en zonas urbanas”, dijo.
Cabe señalar que el pasado mes de agosto se presentó un evento de mordedura hacia una menor de edad por parte de dicha especie en el parque recreativo Caña Hueca.
Sofía Elizabeth, nombre de la menor, fue trasladada al hospital “5 de Mayo” del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS). Si bien el primer reporte médico indicada una situación delicada de salud, debido a la prontitud de aplicación del antídoto logró evolucionar favorablemente.
A raíz de este evento, diversas personas en redes sociales invitaban a matar a la especie. Por lo que su presencia se ha visto doblemente amenazada; por una parte, por el estigma común hacia dichos animales, y por otro, debido a eventos como los anteriores.