Pobladores de Paraíso del Grijalva, en el municipio de Venustiano Carranza, integrados en la Alianza de Comuneros San Bartolomé de los Llanos (Asball) se deslindaron de grupos delictivos, señalando que no están dispuestos a ofrecer agua a ninguna empresa nacional o transnacional.
A través de un comunicado la organización asegura que son fieles defensores de la madre naturaleza, y es por ello que siguen en la postura de no permitir la instalación de la presa “La Angostura”, de la empresa internacional de nombre Acuagranjas Dos Lagos.
En este sentido, desmienten categóricamente el tener algún nexo con los cárteles de la delincuencia organizada, según las difamaciones hechas por personajes vinculados a otras organizaciones.
Señalamiento
A decir de la organización Asball, integrantes de la Organización Campesina Emiliano Zapata Casa del Pueblo (OCEZ-CP) y Organización Campesina Región Carranza (OCEZ-RC) realizan acciones de cobro de derecho de piso y extorsiones tanto a las empresas como a los pequeños comercios en la cabecera municipal.
Además de irrupciones en instalaciones educativas, como en la Universidad del Bienestar “Benito Juárez García”, en Venustiano Carranza, aunado al cobro de derecho de tránsito a los medios de transporte, de pasaje y de carga. A lo anterior, suman que Asball no ha sido una organización beneficiaria en la compra de tierras por parte de las autoridades gubernamentales.
La organización expone que el 6 de octubre de 1984 un grupo fuertemente armado irrumpió en la comunidad Paraíso del Grijalva y por error asesinaron a algunos de sus compañeros. En relación a este incidente culpan a la organización Asball de lo que en realidad fuera su responsabilidad.
Por otra parte, responsabiliza a los integrantes de la organización OCEZ-CP de haber emboscado a 12 de sus compañeros y asesinar a ocho de ellos en el predio denominado “Muk ta Ji’tik”, hechos registrados el 19 de abril de 2001.
Aseguran que la alianza siempre ha buscado la solución por la vía pacífica, pero que la OCEZ-CP se cierra a la solución pacífica, aunque sí recurre a la simulación, victimización y planificación de próximos ataques armados.
Por último, comentan que es evidente la inconformidad de toda la sociedad de Venustiano Carranza hacia la OCEZ-CP y sus aliados.