La Unidad de Política Migratoria, Registro e Identidad de Personas estimó que entre 2030 y 2050 los lugares de donde migrará más población por motivos climáticos será de las costas de Veracruz, Tabasco, Guerrero, Chiapas y Yucatán.
En la investigación realizada por Verónica Valdez y María Calderón denominada “Movilidad humana por desastres asociados a fenómenos naturales y al cambio climático en México”, se determina que los desastres pueden estar asociados con fenómenos naturales de aparición repentina o de aparición lenta.
Los primeros se manifiestan en días, semanas o meses, y pueden tener un origen geofísico (sismos, erupciones volcánicas, tsunamis, deslizamientos de tierra) o hidrometeorológico (huracanes, tornados, inundaciones, granizadas, nevadas, olas de calor o de frío).
Los de aparición lenta se manifiestan en años o décadas, siendo comúnmente asociados como efectos del cambio climático (sequías, aumento del nivel del mar o de las temperaturas, acidificación de los océanos, salinización, degradación de la tierra y los bosques, así como pérdida de biodiversidad o desertificación). A estos dos tipos de fenómenos naturales también se les denomina fenómenos ambientales.
Las investigadoras enfatizaron la nula existencia de datos sobre migración interna por motivos ambientales o climáticos. De acuerdo con estas proyecciones respecto al periodo de 2030 y 2050, los sitios de destino se ubicarán en la meseta central del país, especialmente en la Ciudad de México.
Huracán Stan
La Unidad tomó como ejemplo lo sucedido en Chiapas durante el pasado octubre de 2005, cuando el huracán Stan tocó tierra, golpeando fuertemente Centroamérica y el sur de México.
En nuestro país las entidades que tuvieron afectaciones fueron Chiapas, Hidalgo, Oaxaca, Puebla y Veracruz, siendo la primera de ellas la que más daños registró, y no solo materiales sino también humanas.
“La deforestación en zonas montañosas aumentó la vulnerabilidad a nuevos huracanes e inundaciones por el desbordamiento de los ríos”, recuerda la investigación. Además, devino en el mayor desplazamiento forzado interno de personas por desastres asociados a fenómenos naturales en Chiapas.
Según lo dicho por investigaciones, una parte de la población de la región afectada fue reubicada en lugares circunvecinos en medio de acciones emergentes por parte de organismos públicos.
En Chiapas cerca de 800 comunidades fueron directamente afectadas, alrededor de 100 mil personas salieron de las abruptas regiones montañosas de la entidad y 84 mil personas llegaron a refugios improvisados.
“Otras mil 200 familias damnificadas encontraron hogares-huéspedes que las alojaron durante varios meses o años, porque la reconstrucción de las casas y de la infraestructura destruida demoró casi ocho años”, destacaron.