Bacterias de maíz con potencial para crear biofertilizantes

Bacterias de maíz con potencial para crear biofertilizantesLos suelos de Chiapas son ejemplares. Carlos López / CP

Se identificó que bacterias asociadas al cultivo de maíz en Chiapas tienen potencial para reducir el uso de fertilizantes químicos y aumentar la productividad agrícola de manera sostenible.

Investigadores del Tecnológico Nacional de México (TECNM), campus Tuxtla Gutiérrez, aislaron 46 cepas bacterianas de suelos y granos de maíz en el ejido Palo Alto en Berriozábal, de las cuales varias demostraron capacidades excepcionales para fijar nitrógeno, solubilizar fósforo y producir compuestos que mejoran la absorción de nutrientes.

Entre los hallazgos clave destaca el género Klebsiella, cuyas cepas mostraron habilidades multifuncionales, pues fijan nitrógeno atmosférico (nutriente esencial escaso en suelos locales), liberan fosfatos inmovilizados en terrenos arcillosos y producen sideróforos, moléculas que facilitan la absorción de hierro.

Otros géneros como pseudomonas y stenotrophomonas también sobresalieron en la solubilización de fósforo y tolerancia a metales pesados, útiles para suelos con limitaciones.

Estos microorganismos, conocidos como bacterias promotoras del crecimiento vegetal (PGPB), podrían convertirse en biofertilizantes naturales, reduciendo costos e impactos ambientales.

El estudio, publicado en Terra Latinoamericana, reveló que las condiciones únicas del suelo chiapaneco, rico en arcilla pero con baja disponibilidad de nitrógeno, fósforo y potasio, favorecieron la adaptación de estas bacterias.

“La diversidad microbiana observada es una ventana hacia soluciones biotecnológicas locales”, señala el artículo, que destaca la viabilidad de desarrollar inoculantes específicos para maíces criollos mexicanos.

Descubrimientos

La investigación fue liderada por el Dr. Reiner Rincón Rosales, especialista en ecología microbiana del Tecnológico de Tuxtla Gutiérrez, junto con un equipo multidisciplinario conformado por Adriana Gen Jiménez, Erick Fabián Sarmiento Megchún, Julio César Maldonado Gómez, Luis Alberto Manzano Gómez, Stephanie Solís Zebadúa y Clara Ivette Rincón Molina.

El proyecto contó con financiamiento del TecNM y becas del Conahcyt para jóvenes investigadores.

Se espera que estas bacterias mejoren la nutrición del maíz e incrementen la resiliencia del suelo ante condiciones adversas. Los próximos pasos incluyen validar su seguridad biológica y eficacia en campo.