El balneario San Agustín el Aguaje es uno de los poco manantiales (sino es que el único) que contiene agua virgen, limpia y está abierto a todo público, ubicado dentro del ejido Plan de Ayala, al poniente de Tuxtla Gutiérrez, busca ser un atractivo turístico más de la ciudad.
Se trata de una superficie de aproximadamente tres hectáreas, de donde surge una vertiente de agua dulce, que da origen a un arroyo de unos 50 metros de longitud rodeado de árboles de decenas de metros de altura.
El balneario ha sido recientemente remodelado por los ejidatarios del lugar, quienes han puesto piso de cemento y paredes de concreto para acondicionar el balneario, además de tratar de moldear al riachuelo en pequeñas cascadas y pozas.
“Este lugar ha sido mantenido y remodelado con los mismos ingresos y esfuerzos de los ejidatarios, no hemos recibido ningún tipo de apoyo gubernamental. Es un bien que pertenece a las 130 familias del ejido”, señaló Tomás Díaz Sánchez, comisariado ejidal de Plan de Ayala.
Agregó que el manantial siempre ha existido, pero hace decenas de años era utilizado como bebedero para el ganado. Fue hasta hace algunos años que la nuevas generaciones de ejidatarios decidieron brindar al lugar un giro de recreación.
El balneario San Agustín el Aguaje comenzó a funcionar con una infraestructura netamente natural, es decir, las paredes y el suelo del fondo eran de tierra, lo que ocasionaba que el agua se tornara turbia. “Las personas nos decían que no eran cochis para nadar en agua de lodo”, señaló con una sonrisa el comisariado.
Por ello, hace poco más de un año la remodelación comenzó a realizarse en el afluente, se instalaron paredes y piso de cemento en el fondo acuático, lo que ha impulsado el arribo de más y nuevas personas al sitio natural.
La autoridad ejidal agregó que pretenden hacer de este lugar un centro ecoturístico, ya que a pesar de situarse a escasos 15 minutos del Centro de Tuxtla, este lugar está rodeado de un paisaje natural, además de aún avistarse animales silvestres, como iguanas, ardillas y hasta venados.
Cabe destacar que la Comisión Natural de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) en Chiapas, apoyará al grupo de ejidatarios con ciento siete mil pesos, para construir un parque aéreo y una casa del árbol, un proyecto que iniciará en agosto próximo.
El lugar mantiene un cobro de tan solo cinco pesos para niños y diez a adultos, los cuales sirven para mantener al balneario y seguir remodelándolo. Un sitio que ha comenzado a tener mayores visitas de personas de la ciudad.
La familias se han beneficiado en el aspecto de tener nuevos empleos y que sus siembras reciben mayores cantidades de agua, pero nadie se puede “llevar” el dinero recaudado porque es reinvertido en el funcionamiento del balneario.
Este proyecto que inició hace algunos años, ha beneficiado a distintas familias del ejido ya que ha abierto nuevas fuentes de empleo, como la venta de alimentos, una actividad que antes no existía.
“El balneario sirve para la recreación de las personas y también para el riego de las diferentes milpas del ejido, es nuestra mayor riqueza dentro de la comunidad”, finalizó Díaz Sánchez.