Bebedoko tiene un nuevo hogar

Un cocodrilo de más de tres metros de longitud, que con el tiempo tuvo como hogar el poblado de Puerto Arista, fue capturado debido a varios reportes ciudadanos. Bebedoko —como le pusieron los ambientalistas— fue puesto en observación y después trasladado y liberado en el Santuario Playa Puerto Arista, sitio que desde ahora será su nuevo hogar, por lo que el reptil vivirá entre canales, esteros y bosques de manglar.

La Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), a través de la Dirección Regional Frontera Sur, Istmo y Pacífico Sur, y el Santuario Playa de Puerto Arista, informó sobre las maniobras efectuadas en el caso de este cocodrilo de la especie Crocodylus acutus, mejor conocido como cocodrilo real o cocodrilo de río.

Las lluvias anuales que azotan la región y que generan inundaciones hacen que los cocodrilos amplíen su territorio y se desplacen con mayor facilidad, hasta encontrarse con las barreras físicas y, en este caso, con seres humanos.

Bebedoko vivía en los remanentes del humedal costero, entre manglares y las casas, que poco a poco fueron invadiendo y transformando su hábitat; había sobrevivido a los cambios, hasta que se encontró con las mascotas de los hogares instalados al margen de su estero y, como buen depredador, terminó alimentándose de ellas, ocasionando un gran disgusto de los propietarios, quienes pretendieron cazarlo.

Las denuncias ciudadanas activaron el protocolo SOS Cocodrilo y el equipo técnico del Campamento Tortuguero del Santuario Playa Puerto Arista de la Conanp y el grupo comunitario de atención a varamientos de megafauna marina e interacciones humano-cocodrilo, siendo capturado para su posterior traslocación.

Este ejemplar tiene una talla de tres metros y 11 centímetros, más los aproximadamente 30 centímetros de cola que presenta una amputación producida por un corte, mismo que presumen fue causado por un machete.

El ejemplar estuvo en observación en las instalaciones del Campamento Tortuguero, durante ese tiempo regurgitó aproximadamente tres kilogramos de basura como toallas, pañales y bolsas plásticas.

Se realizaron estudios de monitoreo poblacional de la especie, pues se sabe que el sitio donde fue liberado mantiene una población viable de ejemplares adultos de cocodrilo de río, por lo que se espera que este lugar haya mayores y mejores oportunidades de supervivencia para Bebedoko.

La Conanp hace el llamado a la sociedad a privilegiar el respeto a la vida de la fauna silvestre, llevando a cabo los cuidados y las recomendaciones en la interacción con los cocodrilos en vida silvestre, en pro de una relación armónica y en respeto a fin de conservar y vivir.

En Chiapas habitan tres especies de cocodrilos: el de pan­tano, el cai­mán y el más gran­de, de río o real, que llega a medir has­ta seis me­tros; los ma­chos suelen ser un me­tro más gran­de que las hem­bras. Pue­den vi­vir has­ta 80 años, aun­que hay re­gis­tros de co­co­dri­los que han lle­ga­do a vi­vir has­ta los 100 años.

Además, los cocodrilos son considerados como especies clave y ecológicamente importantes para el mantenimiento de los ecosistemas en que habitan.