El cambio climático impacta al Parque Nacional Cañón del Sumidero, afirmó el director del sitio bajo el cuidado de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), Roberto Escalante López.
Amenazas
Como ejemplo, citó que normalmente los meses de septiembre y octubre son muy lluviosos; sin embargo, esto no ocurrió durante el año 2023, lo que ha provocado que la vegetación esté a expensas de incendios forestales, por lo que el impacto pueda ser mayor.
Además de que hay una disminución de las corrientes de agua de los afluentes: “Muchos ríos en el estado están empezando a secarse, cuando apenas estamos iniciando el año y eso que el periodo de estiaje está comenzando”.
Apuntó que el río Grijalva es uno de los más afectados: “Si seguimos quemando nuestros bosques, deforestándolos, y no reforestamos y no recuperamos las áreas que son muy importantes para la recarga de los acuíferos en el estado, vamos a padecer sequías”.
Sequía
Confío en que este año no sea tan difícil, pero sí se pronostica un año complicado en el tema de los incendios forestales y la sequía prolongada.
De la misma manera aseguró que se estiman lluvias para el mes de mayo, aunque es difícil que esto suceda porque el cambio ha sido bastante drástico.
Expone que el Parque Nacional Cañón del Sumidero ayuda a regular las condiciones climáticas de la capital del estado.
“Todos los servicios que nos proporciona la retención de humedad, la retención de agua, nos ayudan muchísimo para que se recarguen nuestros afluentes y se mantengan con corrientes de agua, así como el río Sabinal”.
De modo que es muy importante que la ciudadanía haga conciencia de proteger estos espacios, porque si no se protegen vamos a tener complicaciones más graves, expuso.
Además de que, por ejemplo, el año pasado se tuvieron olas de calor, y en este año a pesar de que ya es febrero aún se registran ondas gélidas, lo cual es posible que continúen hasta el mes de marzo.