Representantes del Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (Oirsa), integrado por México, Belice, Guatemala, El Salvador, Honduras, Nicaragua, Costa Rica, Panamá y la República Dominicana, recibieron una capacitación en Suchiate, en la cual se habló sobre la aplicación de tratamientos fitosanitarios.
Dicho grupo entendió la necesidad de aplicar tratamientos a mercancías de origen vegetal reguladas para su importación, exportación y movilización nacional, todo ello, impartido por el Servicio Nacional de Sanidad, Inocuidad y Calidad Agroalimentaria de México (Senasica).
Al mismo tiempo, la Dirección General de Sanidad Vegetal del Senasica presentó nuevos sistemas informáticos que contribuirán a la gestión de la información en materia de servicios de la cuarentena agropecuaria.
¿Qué es el Oirsa?
El Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (Oirsa) es una institución especializada en áreas de salud animal, sanidad vegetal, servicios cuarentenarios e inocuidad de los alimentos.
El Oirsa fue fundado en 1953 para brindar cooperación técnica y financiera a los Ministerios y Secretarías de Agricultura y Ganadería de sus Estados miembros, en la protección y desarrollo de sus recursos agropecuarios. Esto para garantizar una producción alimentaria sana y segura.
Servicio
En sus siete décadas de servicio, el Oirsa ha enfrentado las amenazas que representan las plagas y enfermedades para la región, actuando con efectividad, capacidad de respuesta y sentido de anticipación, lo que le ha permitido obtener resultados significativos. Para ello, trabaja de la mano con las autoridades ministeriales de sus países signatarios, brindándoles asesoría y apoyo en los programas y proyectos de prevención, control y erradicación de plagas y enfermedades que estos ejecutan.
En el ámbito de la Salud Animal, el Organismo apoya a los programas regionales de sanidad porcina, bovina, acuícola, aviar, apícola y trazabilidad agropecuaria, obteniendo resultados destacados. En conjunto con sus Estados miembros, el Oirsa ha evitado el ingreso de enfermedades como la fiebre aftosa y la encefalopatía espongiforme bovina (EEB) a la región. Además, se han obtenido declaratorias de área libre como la de peste porcina clásica (PPC) en 2011.