Caso Yudiel exhibe fallas estructurales

Caso Yudiel exhibe fallas estructurales

Reinserta, organización de la sociedad civil, condenó el caso de Yudiel “N”, conocido como “El Coyote Consentido”, quien desde el penal “El Amate” continuaba abusando sexualmente de niños, a pesar de haber sido condenado a más de 100 años por delitos de material de abuso sexual infantil.

“La muerte de este youtuber no puede ni debe considerarse como el cierre de este caso. Por el contrario, debe volver a encender todas las alertas sobre las fallas estructurales del sistema penitenciario que permitieron que estos abusos continuarán incluso al interior de un centro”, expuso.

Reinserta visibilizó la evasión de controles elementales de seguridad para seguir cometiendo agresiones, lo que separa a dicho condenado a no lograr una reinserción social.

La organización ha documentado al menos cinco casos confirmados de abuso sexual infantil dentro de centros penitenciarios en el país, lo que refleja una crisis sistémica de protección a las infancias en estos entornos.

“En México niñas y niños siguen siendo abusados sexualmente dentro de espacios en custodia y responsabilidad del Estado. Esto ocurre porque impera la omisión, la negligencia y en muchos casos, la corrupción y complicidad institucional”, añadió.

Reinserta identificó que la falta de protocolos efectivos de separación, monitoreo y vigilancia permite que estos delitos ocurran con total impunidad, por lo que las autoridades encargadas de promover la reinserción social desde las cárceles no cuentan con medidas de atención especializadas para agresores sexuales.

Además, los niños que ingresan a los penales lo hacen bajo filtros de seguridad básicos, sin embargo, al interior la falta de acceso a espacios seguros, la nula tecnología, el poco personal son un caldo de cultivo para que los agresores sigan abusando sexualmente.

También, denunciaron la falta de controles dentro de los centros penitenciarios, persistencia de vacíos legislativos alarmantes en el tratamiento de agresores sexuales. Mientras otros países de la región han avanzado en normativas que contemplan programas de rehabilitación, evaluación psicológica continua y mecanismos de seguimiento.