Celebran Día del Locutor con entrega de reconocimientos

Con una cena y con la entrega de cinco reconocimientos, locutores de San Cristóbal de Las Casas celebraron el Día del Locutor la noche del sábado 14 de septiembre.

Las actividades fueron organizadas por los propios locutores, sin la intervención de autoridades ni de asociaciones del ramo.

“Es una reunión de confianza, entre compañeros y amigos en esta noche tan especial. Así lo quisimos a hacer, entre amigos, sin siglas de ninguna especie”, dijo el periodista Hugo Robles Guillén, uno de los organizadores, quien lleva 47 años trabajando en la radio.

“Lo pensamos entre amigos y es en esa tesitura que entregamos reconocimientos a quienes tienen una trayectoria digna de tomarse en cuenta, ejemplo para muchos en San Cristóbal. Son personas, amigos, profesionales de la comunicación a quienes estimamos y admiramos”, agregó.

Los cinco locutores que recibieron un reconocimiento por su labor a la largo de muchos años frente al micrófono son: José Luis Ruiz Villafuerte, Armando Castellanos, Francisco López Gómez, Salvador Camacho Corzo y el propio Hugo Robles Guillén.

Fue este último quien hizo una breve presentación de sus compañeros galardonados, con la inclusión de anécdotas en sus inicios o incluso antes, al tiempo que recordó cómo durante la inundación de 1973, sacaron el transmisor de la estación XEWM de las oficinas que estaban ubicadas en la calzada del panteón, improvisando una balsa.

De José Luis Ruiz Villafuerte recordó que en 1973 “llegó a la WM, con su primera nota redactada a mano en papel de una bolsa de palomitas y la entregó a la secretaria, pero no se transmitió, como tampoco otras que llevó posteriormente, hasta que un día escuchó emocionado su nombre cuando leyeron una nota.

De Armando Castellanos Aguilar, el decano de los locutores de San Cristóbal a sus 72 años de edad, Robles Guillén contó que “convivimos desde niños. En el mercado de San Francisco organizó la elección de la reina del mercado, con el propósito de lograr algunos recursos económicos porque su situación económica era complicidad. Tenía mucho ingenio y hacía una serie de actividades. Luego constituyó en un espacio del mercado lo que llamó el Circo Globito Hermanos, con costales, lonas y lo que encontraba. Ponía culebritas de agua. Tenía un perro llamado Capitán, al que no le dio de comer durante una semana, sólo un hueso, lo que ocasionó que se pusiera muy bravo; cuando pasaban los niños, el perro ladraba muy fuerte. ‘Traen leones’, decían los niños. Los compañeros del barrio participaban como payasos”.

Dijo que Castellanos Aguilar fue la primera voz en la XERA, la estación del gobierno del estado.

En cuanto a Francisco López Gómez, recordó que trabajaba en los años 70 en la empresa, ya desaparecida, llamada Jiménez, Sociedad Anónima y aprovechaba para hacer grabaciones en grabadoras de carrete mientras estaba en la bodega. “Alguna vez se enteró Raúl Jiménez y como tenía contacto con el gerente de la WM, Francisco Narváez Rincón, le habló y se quedó trabajando”, desde 1972. “Paco López sigue en la estación desde que entró. Es ejemplo de constancia, persistencia; eso le reconocemos”.

En medio de risas y de un ambiente de franca amistad, Hugo narró cómo él y Salvador Camacho Corzo practicaban la locución en el salón de clases que compartían en la secundaria. “En esa época estaba de moda Joaquín Peláez en el noticiero 24 Horas. Salvador decía: ‘ahora vamos con nuestro corresponsal en España’, y yo hacía la voz de Joaquín Peláez’”.

Contó cómo el primer anuncio que Camacho Corzo grabó al probarse en la WM quedó listo al primer intento, con lo que comenzó su historia de casi 50 años frente al micrófono, consolidándose como uno de los mejores locutores de Chiapas.

“Esas anécdotas son para que ustedes conozcan la parte humana de los compañeros”, expresó Robles Guillén, durante el convivio en el que fueron rifados varios regalos. Y siguió la fiesta hasta la madrugada.