La charrería en Chiapas celebra su reciente declaratoria como Patrimonio Cultural Inmaterial del estado, un logro gestionado por más de cinco años y que hoy coloca a esta práctica ecuestre en un sitio de honor dentro de la geografía chiapaneca.
En entrevista, Carlos de Jesús Bermúdez Albores, presidente de la Unión Estatal Chiapaneca de Charros, destacó la importancia de este reconocimiento, impulsado por el Gobierno Estatal.
“Nos sentimos muy contentos, gracias al apoyo brindado al señor gobernador, hombre también de a caballo”, afirmó Bermúdez Albores.
Actividad presente en Chiapas
Contrario a la percepción de que la charrería es exclusiva del centro y norte del país, en Chiapas cuenta con una vibrante comunidad.
“En Chiapas hay bastante charrería”, aseguró el líder, detallando que la unión estatal agrupa a más de 800 agremiados, incluyendo hombres, mujeres, escaramuzas, niños y niñas. Además, subrayó su conexión nacional e internacional: “Somos parte del sur, pero también a nivel nacional y en parte de Estados Unidos”, donde existen cerca de mil asociaciones registradas.
El reconocimiento como patrimonio, explicó, no es solo un honor simbólico, sino una herramienta para fortalecer la disciplina. “Nos sirve mucho porque nos reforzamos nos fortalece para pedir también apoyos al Gobierno del Estado, representar el estado, hacer más charrería”, señaló.
Patrimonio de la humanidad
Recientemente, la charrería chiapaneca demostró su pujanza en el marco de la Feria Chiapas, donde se realizó un evento con la participación de seis estados (Yucatán, Campeche, Oaxaca, Veracruz y Chiapas). Equipos de Campeche y Chiapas se alzaron con los primeros lugares, evidenciando el alto nivel competitivo de la región, que en la actualidad se ubica entre los siete u ocho primeros lugares a nivel nacional.
Bermúdez Albores recordó que la charrería está “blindada” a nivel internacional desde 2006, cuando fue declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la Unesco.
Frente a debates contemporáneos sobre el trato a los animales, el presidente de los charros chiapanecos fue enfático: “En la charrería no hay castigo para los caballos”. Aclaró que el reglamento deportivo establece infracciones y puntos malos para quienes maltraten a un animal durante las competencias oficiales. Sobre la polémica de las carreras de caballos, indicó que no les afecta de forma directa, ya que “es completamente diferente” y su práctica se rige por estatutos federativos que priorizan el respeto.












