Las festividades decembrinas se enfrentan este año a un duro rival: la presión inflacionaria en los alimentos. La tradicional cena de Nochebuena, símbolo de reunión y celebración familiar requiere un desembolso significativamente mayor, de acuerdo al análisis del consultor e investigador de mercados, Gilberto Ruiz Cáceres.
Para muchas familias, la festividad viene acompañada de la disyuntiva entre ajustar el menú, reducir la lista de invitados o asumir una carga financiera que se extiende más allá de las fiestas.
Un incremento que se sirve en la mesa
De acuerdo con Ruiz Cáceres, el cuarto trimestre del año, marcado por la alta demanda del sector restaurantero y de los hogares, ha impulsado el alza los precios. “Se está estimando que, dependiendo lo que decidan cenar las familias chiapanecas, el incremento puede oscilar entre el 12 y el 18 % en comparación con diciembre de 2024”, afirmó el especialista.
Para una cena de gama media-alta, que incluya platillos como pavo, bacalao, lomo relleno o pierna mechada, además de bebidas, el costo para una reunión de aproximadamente 20 personas puede situarse entre 17 mil 500 y 18 mil 500 pesos. Esto representa un gasto cercano a los 825 pesos por persona.
Cocinar en casa, una salida
“Los precios anteriores se basan en si se manda hacer la cena en algún lugar particular”, aclaró Ruiz Cáceres. Sin embargo, subrayó que la preparación en casa sigue siendo la principal válvula de escape para la economía familiar.
“Esto puede generar ahorros de hasta un 25 % en los costos”, precisando que una cena casera para el mismo número de personas podría oscilar entre 12 mil 500 y 14 mil pesos, ya incluyendo bebidas.
Los productos que más encarecieron la celebración
El investigador identificó los insumos cuyo precio más impactó en la conformación de la cena. En el primer lugar, y con un aumento notable, se encuentra la carne de res cuyo kilogramo pasó de 200 a 250 en este 2025.
En segundo término, aunque con una penetración menor en la entidad, destaca el bacalao, cuyo precio se disparó hasta en un 26 % respecto al año pasado.
“Los diferentes insumos como pueden ser el tomate, la cebolla, estos también subieron significativamente de precio por la alta demanda que hay en este momento”, agregó.
La brecha entre lo urbano y lo rural
Ruiz Cáceres hizo una distinción crucial entre las ciudades principales y los municipios con mayor arraigo rural.
En localidades como Tuxtla Gutiérrez o San Cristóbal de Las Casas, la tendencia a encargar la cena o comprar todos los insumos es más marcada.
En contraste, en municipios como El Bosque, Simojovel o Bochil, la celebración conserva un carácter más autosuficiente.
“Ahí justamente hay muchos lugares en donde se acostumbra que la cena de Navidad sea preparada en casa por los mismos miembros de la familia y en estos municipios muchas veces las mismas familias tienen insumos: tienen gallinas, tienen guajolotes, tienen el cochito. Y eso hace que justamente los precios puedan ser menores”, explicó.
Esta autoproducción mitiga de manera importante el impacto de la inflación.
Sin resaca financiera
Frente a este panorama, el experto fue enfático en sus recomendaciones para evitar que la alegría de diciembre se transforme en deudas en enero:
Hacer un presupuesto realista y ceñirse a él: “es lo primero: hacer un presupuesto de cuánto se puede gastar”. Sugirió considerar una parte del aguinaldo (por ejemplo, una tercera parte) para cubrir obsequios, cenas y festejos, sin sobrepasar ese límite.
Optar por la preparación casera: Es la estrategia de ahorro más efectiva, pudiendo reducir la cuenta final hasta en una cuarta parte.
Evitar financiar la festividad con deuda: “sobre todo, no pegarle a la tarjeta de crédito”, advirtió Ruiz Cáceres. “A final de cuentas esa cena ya de por sí nos iba a salir cara; si lo pagamos con tarjeta de crédito se nos va a encarecer aún más y la vamos a seguir pagando muchos meses después de que hayan pasado las fiestas decembrinas”.
En un año donde los precios hablan fuerte, planificar la Navidad se ha convertido en un paso tan importante como preparar la cena misma.












