De acuerdo al Consejo Nacional de Población (Conapo), Chiapas es la entidad con la población más joven del país, la cual representa el 32.7 % de la población estatal.
Para Alberto Díaz, de 22 años, ser joven representa “libertad de decidir, es un punto donde tomamos la decisión de continuar los estudios, formar una familia, emprender un negocio; sin duda, la juventud es una etapa de decisión”.
En el estudio conjunto “Situación de las personas adolescentes y jóvenes de Chiapas 2021”, del Fondo de Población de las Naciones Unidas, el Instituto Mexicano de la Juventud (Imjuve) y el Conapo, se detalla que la edad media de la población chiapaneca es de 24 años, “con lo que se concluye que la población en la entidad es la más joven a nivel nacional”.
Para Alberto, ser un joven chiapaneco es enfrentarse a retos, el principal son las “oportunidades laborales, continuar estudiando y encontrar un trabajo; muchas personas de mi edad tienen que salir del estado para encontrar algo o se dedican a otra cosa distinta a la que estudiaron”.
“Y ahorita que fue lo del covid, hubo mucha deserción escolar, tengo varios compas que se salieron porque tenían que chambear”, acotó.
El estudio resalta que uno de los desafíos más importantes en materia de juventud está relacionado con el trabajo digno; en México se estima que el 53.9 % de las personas jóvenes percibe un ingreso que no les posibilita la canasta básica; mientras que en Chiapas, el porcentaje es de 80.7 %.
En tanto que, en materia educativa, en el estado el 32.5 % de los jóvenes vive en situación de rezago educativo.
El estudio también refiere que en los próximos años se espera una reducción de la población joven, derivada de políticas en materia de salud reproductiva. Para Alberto, su generación es “bastante versátil”, pues hay “quienes se cuidan al máximo y quienes de plano, nada”.
Ejemplificó con su etapa como estudiante de preparatoria, la cual fue la “de más deserción por embarazo”. A nivel estatal, 31 de cada 100 mujeres de 15 a 19 años reportó haber usado algún método anticonceptivo durante su primera relación sexual.
Alberto sostiene que debe ser en secundaria o incluso desde primaria la enseñanza de la salud reproductiva, ya que “si no hay una correcta educación van a terminar embarazados o con una enfermedad de transmisión sexual”.
Por último, destacó que uno de los temas que más ha tomado fuerza en su generación es “la lucha por el derecho de las mujeres, y es bueno porque hay cosas que se invisibilizan y ahora hay una cierta balanza, como que se ha normalizado el respeto, algo que debería ser natural; ha escalado y ganado su lugar”.
La igualdad de género es considerado uno de los derechos más importantes en el acceso a una vida libre de violencia. En Chiapas el 39.2 % de las mujeres jóvenes (15 a 29 años) ha sufrido al menos una experiencia de violencia perpetrada por su pareja, siendo la más frecuente la emocional (34.8 %).