Chuchiltón, semillero de un proceso de transformación

En la comunidad de Chuchiltón, en San Andrés Larráinzar, se presentaron los resultados del proyecto “Resiliencia de las mujeres indígenas ante los impactos de la covid-19”, implementado por el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) en México, la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en México y la Secretaría de Igualdad de Género (Seigen) de Gobierno del Estado de Chiapas.

La titular de la Seigen, María Mandiola, aseveró que una de las grandes fortalezas de Chiapas está en nuestras comunidades indígenas, “en nuestras mujeres indígenas, quienes son guardianas de nuestras costumbres y de nuestro gran patrimonio cultural, que tiene profundas raíces ancestrales. Chuchiltón es el semillero de un proceso de transformación política, social y cultural en favor de una vida de derechos plenos para las mujeres y niñas indígenas”.

María Mandiola relató el contexto en el que se dio el Primer Acuerdo de Asamblea Indígena para Erradicar la Violencia contra las Mujeres en esta comunidad de Larráinzar: “Esto nos da una clara muestra de que a través de los procesos de autonomía indígena se toman decisiones comunitarias para proteger la vida, la integridad y los derechos de las mujeres y niñas, enviando un mensaje contundente de cero tolerancia a la violencia machista”.

De la misma forma, recordó que mediante una asamblea comunitaria “se acordó implementar el proyecto de fortalecimiento a la resiliencia, el derecho a una vida libre de violencia y la seguridad alimentaria de las mujeres”.

Por su parte, la representante de la FAO en México, Lina Pohl, puntualizó lo siguiente: “Durante 2021 y 2022 hemos seguido experimentando una pandemia y sus consecuencias. Además, se han sumado conflictos internacionales, una subida en los precios de los alimentos, desigualdades y tensiones. Situaciones que afectan directamente a la seguridad alimentaria. No podemos dejar a nadie atrás y, por tanto, el enfoque en la suficiencia alimentaria de las mujeres rurales e indígenas es crucial para la transformación de sistemas agroalimentarios, para poder brindar dietas saludables a toda la población”.