Chuntás, símbolo de 
tradición y “arrechura”

Hombres, niños y mujeres han preservado su herencia y gusto por una de las tradiciones más representativas de Chiapa de Corzo: la Fiesta Grande, donde el personaje de la chuntá juega un papel muy importante, pues reivindica la libertad y expresión de los que bailan en esta verbena.

La fiesta del pueblo inició desde el pasado 1 de enero, que en sintonía de la música típica del tambor y la flauta de carrizo ambientan las calles; un clamor en tono burlón se escucha con enjundia: “¡arrecha la que no grite!”, momento en donde todas y todos agilizan su paso para prepararse y ponerse bellas.

Es hasta el 8 de enero, por la noche, que las calles se pintan de colores, algarabía y “arrechura” porque las llamadas “pandillas” de chuntás se unifican para recorrer las iglesias de Chiapa de Corzo, con el fervor que significa esta fiesta grande.

Las coloridas banderitas de papel picado lucen sobre las cabezas, faldas de cuadros o flores, blusas de holanes, listones, llamativos accesorios y maquillaje. El traje florar confeccionado a la medida y con estilo tradicional, luce con elegancia.

Las chuntás observan su reflejo y detallan cuidadosamente los últimos retoques en sus rostros mientras esperan el llamado para continuar la fiesta.