La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) ejecutó la clausura temporal total de dos obras que se realizaban sin autorización en Áreas Naturales Protegidas (ANP) de Chiapas, actos que representan un grave daño a ecosistemas frágiles y esenciales para la región, informó el delegado estatal de la dependencia, Jorge Zapata.
Medidas
Las clausuras se impusieron por actividades de remoción de vegetación, construcción de rellenos y afectación directa a humedales, las cuales impactan de manera irreversible servicios ambientales clave, como la regulación del clima y la provisión de agua.
El primer operativo se realizó en el municipio de San Fernando, dentro de la Zona Protectora Forestal Vedada “Villa Allende”. Ahí se clausuraron obras irregulares, que implicó la remoción de vegetación en un área de mil 116 m².
Esta ANP, recategorizada recientemente en septiembre de 2024, es un bastión ambiental de la región.
Afectan humedales
La segunda clausura tuvo lugar en San Cristóbal de Las Casas, donde se afectaron mil 193.68 m² de los humedales de montaña, dentro del área de Protección de Flora y Fauna La Kisst y María Eugenia, también designado como Sitio Ramsar de importancia internacional.
Este complejo de humedales, declarado como ANP federal apenas en enero de 2024, es un caso paradigmático de la presión que ejercen el desarrollo inmobiliario y otros ilícitos sobre los ecosistemas. Pese a su reciente protección y a su amplio respaldo social, ha enfrentado una ola de delitos ambientales, incluyendo cambios de uso de suelo, incendios forestales y la extracción ilegal de agua.
Las clausuras impuestas por la Profepa representan un acto de autoridad crucial para detener la degradación inmediata, pero subrayan la batalla constante por equilibrar el desarrollo, con la conservación de los recursos naturales que sostienen la vida en Chiapas.