La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) impuso una clausura temporal parcial a la planta extractora de aceite de palma Industrias Oleopalma, S.A. de C.V., ubicada en Mapastepec, tras detectar irregularidades en el manejo de aguas residuales y residuos durante una inspección realizada los días 24 y 25 de abril.
De acuerdo con el informe oficial, la empresa superó en un 31.81 % el volumen de descargas de aguas residuales autorizado en su permiso vigente, lo que representa un “grave riesgo para la salud pública y los habitantes de la zona”.
Además, se verificó que la planta carece de un área de almacenamiento de lodos acorde a la Norma Oficial Mexicana NOM-004-SEMARNAT-2002, que regula la disposición de residuos peligrosos.
Como medida de seguridad, la Profepa clausuró las áreas responsables de generar aguas residuales y de secado de lodos, y ordenó a la empresa implementar acciones urgentes para mitigar el riesgo ambiental.
Entre los posibles impactos destacados por la dependencia están la contaminación de suelos, cuerpos de agua y biodiversidad, así como la proliferación de compuestos dañinos, como nitrógeno, fósforo, materia orgánica y bacterias coliformes.
La intervención forma parte de las acciones de inspección en la región Istmo-Costa de Chiapas, enfocadas en vigilar el cumplimiento de la normatividad ambiental; es de recordar que, ante las autoridades medioambientales, pobladores locales denunciaron hace una semana un alarmante aumento de casos de cáncer y enfermedades de la piel en la región.