Complejo hidroeléctrico Grijalva con azolvamiento

El sistema hidroeléctrico del río Grijalva genera alrededor del 40 % de la energía del país, por lo que es de importancia nacional, sin embargo, las cuencas aportadoras a este son amplias y han tenido un proceso de deterioro extenso, ocasionando en diferentes ocasiones, por eventos extremos, algunas pérdidas humanas y de recursos.

Especialista

Lo anterior lo mencionó Itzel Castro Mendoza, investigadora del Campo Experimental Centro de Chiapas del Instituto Nacional de Investigaciones Forestales, Agrícolas y Pecuarias (Inifap), al presentar la investigación: Determinación de los sitios prioritarios de conservación para disminuir la erosión y producción de sedimentos en las subcuencas aportadoras al complejo hidroeléctrico Grijalva, en el seminario “Aportaciones para el manejo integral de cuencas en México”.

Esta situación ha provocado que las presas empiecen a perder su capacidad de producción, ya que han sufrido un proceso de azolvamiento, es decir, que el fondo de los complejos se comienza a llenar de sedimentos que aporta todo el terreno que lleva agua hacia ellos.

Lo que hicieron en la investigación fue identificar las áreas prioritarias de conservación e intervención, enfocándose en seis cuencas: la del río Hondo, Tuxtla Gutiérrez, Santo Domingo, La Concordia, Yahuayita y río Grande. Calcularon la erosión actual de la región.

Actividades

Se hicieron talleres con expertos de cada una de las subcuencas, con la participación de población y organizaciones sociales para considerar más variables sobre cada zona, datos más específicos, sobre las problemáticas, quemas forestales, ganadería y otras.

El beneficio de tener estas áreas delimitadas es la mitigación de los efectos de la erosión, el aumento de la cobertura vegetal, el recuperar y mantener las funciones hidrológicas de las cuencas intervenidas, un proceso de optimización de elección de las áreas de intervención que conlleva a una eficiencia del recurso invertido.