Con celebración religiosa, recuerdan la masacre de Acteal

Con celebración religiosa, recuerdan la masacre de ActealLas Abejas de Acteal piden a los tres niveles de gobierno realizar investigaciones que lleven a desmantelar a los grupos armados. Cortesía

La organización Sociedad Civil Las Abejas de Acteal exigió a los tres niveles de gobierno que realicen “investigaciones reales que lleven a desmantelar a los grupos armados vinculados con el crimen organizado que operan impunemente en la región tsotsil”.

También demandó que “cesen de inmediato la intimidación y criminalización de las comunidades que defienden la justicia y la paz” y que se garantice la seguridad de los habitantes de la comunidad de Tzajalch’en, municipio de Chenalhó.

“La violencia en la zona va escalando, por lo que las comunidades alertan sobre el riesgo de una masacre del pueblo tsotsil por parte del crimen organizado y se vuelva a repetir la historia de 1997 cuando, después de que denunciamos la presencia de los paramilitares y Jtotik Samuel (Ruiz García) también alertó al gobierno de que si no se atendía algo podía pasar, pero no nos creyeron”, agregó

En un comunicado leído durante la celebración religiosa que se realizó este domingo en Acteal para recordar a los 45 indígenas asesinados el 22 de diciembre de 1997 en esa localidad, Las Abejas manifestaron que “hemos vivido historias de violencia en nuestro municipio, desde 1996 con los paramilitares”.

Agregó: “La historia más reciente es la que está pasando en algunas comunidades, como en Tzajalch’en que denunció la presencia de grupos armados vinculados con el crimen organizado, identificados con los gobiernos. Hace unos días, hubo disparos, no hubo heridos, pero se creó un clima de miedo, provocado por hombres armados que entraron intimidando a la comunidad”.

La agrupación también se solidarizó “con los y las compañeras de México y de otros países que, desafiando el régimen israelí, se dirigen a Gaza llevando alimentos”, al tiempo que invitó a la población a “no aceptar que la violencia se convierta en nuestra norma de vida. No nos identifiquemos con esa forma de vivir. Tenemos dignidad, principios y valores humanos, que nos comprometen, a armonizar la vida con acciones no violentas”.