Acompañado de personalidades políticas del orden municipal, estatal, federal, así como de autoridades militares, el cónsul Honorario de Francia en Chiapas, Patrick Jean Robert De Bréon, conmemoró los 230 años de la Revolución Francesa, acto celebrado en las instalaciones del teatro Francisco I. Madero, en Tuxtla Gutiérrez.
Este suceso marcó toda una época en Europa, considerando que se trató de un conflicto político y social, en oposición a lo que en ese momento se llamaba el Antiguo Régimen.
Para todas las naciones, explicó el cónsul, este momento es histórico; el pueblo francés estaba agobiado de tantas restricciones, situación que provocó la toma de la Bastilla por parte de los pobladores en 1789; ahí comenzó el período oscuro para ese país que, después, dio la pauta para otros países de buscar su libertad.
Desde aquel golpe de Estado, por parte de Napoleón Bonaparte, lo que se ha buscado es dejar atrás las diferencias políticas que convulsionaron a este país y otras naciones europeas.
Durante el evento, se entonaron los himnos nacionales de México y Francia; también se cantó el himno a Chiapas. “Hemos luchado para dejar el Antiguo Régimen atrás”, remarcó el cónsul y añadió que hoy existe la libertad, enmarcada en el respeto a los derechos humanos.
Ante los invitados, el discurso estuvo centrado en la hermandad que existe entre Francia y Chiapas, los trabajos de colaboración y la solidaridad que hay para resolver los asuntos diplomáticos.
Remarcó que se trata de la quinta ocasión en encabezar esta celebración; para ellos, dijo, es una fiesta nacional y atrás quedaron los malos entendidos y conflictos; hoy, puntualizó, se viven tiempos de fraternidad en cada uno de los países donde Francia tiene representación.
La revolución, consideró, ha tenido puntos positivos pero también aspectos no tan favorables, porque fueron tiempos de ira y maldad. Pidió juntar las voluntades para un presente digno y un mejor futuro, enmarcados en la igualdad, la libertad y la fraternidad.
Finalmente, el cónsul de Francia en Chiapas agradeció la presencia de familiares, amigos y de las personas que se dieron cita a la conmemoración, porque demuestra un acto de fraternidad hacia el pueblo de Francia.