Empresarios locales del ramo de la construcción hicieron un llamado a los ayuntamientos de la entidad y al Gobierno del Estado para que sean tomados en cuenta dentro de la asignación de la obra pública. Denunciaron que por seis años fueron excluidos, ya que se privilegió a constructores foráneos.
Desplazados
Benjamín Martínez López, constructor tapachulteco y expresidente del Colegio de Ingenieros Civiles de la Costa de Chiapas, afirmó que en la administración anterior fueron desplazados, tal y como sucedió en la construcción del libramiento Sur, donde las firmas de Tapachula no fueron consultadas, mucho menos consideradas.
Reconoció que se ha señalado voluntad de las autoridades, los proyectos actuales son en su mayoría heredados de administraciones anteriores, lo que limita la participación técnica local, sin embargo, confían en que se abrirán espacios para que los colegios se involucren en estudios, consultorías y supervisión de infraestructuras.
Expuso que, “posiblemente como es el arranque y el primer año de gobierno ya tienen proyectos encaminados que se habían venido trabajando antes y durante la campaña, entonces me imagino que le están dando preferencia a quienes hicieron los estudios y proyectos y por eso estamos siendo excluidos”.
Llamado
El constructor hizo un llamado a las autoridades para mantener la política de “cero moches, cero corrupción” y garantizar que las adjudicaciones se realicen con base a méritos técnicos y transparencia.
Indicó que en esta Nueva ERA y ante las políticas emprendidas por el gobernador Eduardo Ramírez Aguilar, existe una oportunidad para que los profesionales locales se integren de manera más efectiva a los procesos de planeación y ejecución de obras.
“Estamos en una etapa clave, nuestra intención es aportar experiencia, ética y calidad, bajo el marco de la ley, por lo que pedimos a los ayuntamientos a tomar en cuenta a los constructores locales, quienes generamos fuentes de empleos a cientos de familias de la región”, expresó.
Además, enfatizó la urgencia de retomar obras clave, como la ampliación del libramiento Sur, la cual avanza de manera lenta, ya que se debió terminar en el gobierno anterior, por lo que confían en que con el nuevo gobierno se pueda acabar toda la corrupción e impunidad en la obra pública.
