El secretario de Seguridad Pública y Tránsito Municipal de Tuxtla Gutiérrez, David Hernández Pérez, explicó sobre el programa Tuxtla Responsable, una iniciativa que busca generar conciencia ciudadana sobre la seguridad vial mediante advertencias previas a las multas y operativos transparentes. Destaca que ya se han emitido más de 600 amonestaciones en la ciudad desde el impulso del proyecto.
El programa Tuxtla Responsable, que entró en vigor el pasado 16 de julio, de acuerdo con el secretario, tiene la finalidad de fomentar una cultura vial responsable y reducir los accidentes en la capital.
Además, recordó que la estrategia estará vigente hasta el 16 de octubre de este año.
“El propósito no es solo infraccionar. Queremos que el ciudadano entienda el por qué de su infracción, que sepa que está en juego su vida, su patrimonio y el de los demás”, mencionó.
Afirman entablar diálogo
Asimismo, señaló que los elementos de Tránsito actualmente detienen al conductor, lo amonestan verbalmente y le explican la falta cometida, promoviendo un diálogo directo con la ciudadanía.
Hasta el momento se han emitido más de 600 amonestaciones, de las cuales más de 200 personas ya fueron detectadas como reincidentes.
Estos casos se documentan y se suben a una base de datos para identificar patrones de comportamiento en la vía pública.
Entre las infracciones que sí se sancionan desde la primera falta, están las siguientes:
manejar en estado de ebriedad, estacionarse en lugares prohibidos, participar en un percance vial y faltar al respeto a agentes de Tránsito o Seguridad Pública.
Por otro lado, se otorgan advertencias sin sanción económica por faltas, tales como no portar cinturón de seguridad, no traer la placa delantera, no colocar el engomado en lugar visible y no usar casco (en el caso de motociclistas).
Todas estas acciones son videograbadas mediante una unidad móvil de alcoholimetría, lo que garantiza la legalidad y transparencia de los operativos, detalló.
El programa estará activo hasta el 16 de octubre, y forma parte de una estrategia más amplia para reconstruir la relación entre ciudadanía y autoridad.
“Si queremos una ciudad segura, el respeto a la ley debe comenzar por el ciudadano”, afirmó.