Según datos del Servicio de Administración Tributaria (SAT), al 18 de junio, los ingresos tributarios alcanzaron los dos billones 464 mil 914 millones de pesos (mdp), lo que representa un incremento de 15.9 % real, en comparación con el mismo periodo del año anterior.
Especialista
Ante el próximo cambio de gobierno, Néstor Gabriel López, contador público fiscalista, comentó que la actual administración federal se caracterizó por elevar la presión tributaria a los particulares en alrededor del 15 %, muy cerca de la media de la Organización para la Cooperación y Desarrollo Económico (OCDE).
“Una realidad es que con las normas de transparencia cada vez más son las personas que se interesan por cumplir con la presentación de sus declaraciones patrimoniales y de impuestos, porque pugnan por una devolución o porque lo tienen que hacer sino caen en faltas administrativas, sobre todo los funcionarios públicos”, consideró.
Sin embargo, mencionó que existe algo llamado índice de presión tributaria, encaminado a una sustentabilidad económica, para lo que se requiere el crecimiento, aparejado con desarrollo, que no es lo mismo.
“Crecimiento es vender más en relación al año pasado, pero el desarrollo implicaría que esas ventas estuvieran en una mayor base de personas, o bien, que ese crecimiento económico se derramara para la mayor base poblacional posible y los empleos es uno de los medios más eficaces”, expuso.
Todo eso se conoce como simplificación tributaria, que es pugnar para que haya mayor crecimiento y desarrollo económico a la luz de leyes formales y materialmente emitidas, y que todo eso se derive en instrumentos e instituciones que vigilen el cumplimiento espontáneo.
“México recaudó de enero a mayo 2.30 billones de pesos, tres mil millones más de lo que tenia proyectado, pero eso no obedeció a una mayor aceleración económica, sino a la recaudación del Impuesto al Valor Agregado (IVA), que, del año pasado a este, disminuyeron el monto de las devoluciones”, expresó.