El Centro de Investigaciones Multidisciplinarias sobre Chiapas y la Frontera Sur de la Universidad Nacional Autónoma de México (Cimsur-UNAM) realizó un conversatorio de mujeres desplazadas de Chalchihuitán, Aldama y Nueva Palestina, en Ocosingo; quienes denunciaron un estado de incertidumbre para ellas y sus familias.
En el marco de la conmemoración del Día Internacional de la Mujer (marzo, “mes de la mujer”), a través de su Comisión Interna para la Igualdad de Género, el Cimsur-UNAM replicó la voz de mujeres tsotsiles y tseltales de los municipios antes señalados; aprovecharon para denunciar la situación que atraviesan por la continua violencia, la cual ha provocado desplazamiento forzado interno (en 2017, 2018 y 2021), despojo y acciones etnocidas ante la aquiescencia del Estado.
Testimonios
Las mujeres expusieron haber vivido múltiples violaciones a sus derechos humanos: tortura sexual, aborto provocado por violencia física, tortura de sus hijos e hijas, graves afectaciones psicoemocionales; así como encarcelamiento, tortura, asesinato y desaparición forzada de sus familiares.
Debido a lo anterior, las afectadas y sus familias han padecido/padecen condiciones precarias de vida, en campamentos o espacios hacinados. Sin olvidar el desarraigo cultural.
En este conversatorio las mujeres indicaron que pese a la emisión de recomendaciones y medidas precautorias a su favor, por parte de organismos de derechos humanos —tanto nacionales como internacionales—, el Estado se ha mantenido omiso en su responsabilidad de atender sus demandas y brindarles protección. Esto en vista de que hasta el momento no han tenido reparación integral del daño.
Ante ello, las y los asistentes a la actividad se sumaron a la exigencia de atención inmediata para dar solución con justicia y dignidad a las problemáticas antes descritas, en cumplimiento con la normatividad estatal, nacional e internacional sobre el desplazamiento forzado interno (DFI). Entre ellas, se encuentran las doctoras Enriqueta Lerma Rodríguez, Irazú Gómez y Ana Magdalena Solís
Por último, invitaron a las instituciones académicas y organizaciones de la sociedad civil a sumarse a esta exigencia.