Privación ilegal de su hija y agresión por parte de supuestos elementos de procuración de justicia, son los dos puntos principales que denuncia Juan Barrios.
“No pretendo quedarme callado más tiempo para alzar la voz, por mí, por todos aquellos hombres que son obligados a callar por pena, por presión social, por temor o por la violencia que llegan sufrir; alzo la voz por los niños y por todos aquellos que se puedan sentir identificados conmigo, pero sobre todo por mi menor hija que aún no tiene voz ni puede defenderse, pero para eso me tiene a mí que soy su padre, ya que tanto sus derechos como mis derechos fueron violados, violentados, ignorados y hasta humillados”, expresó.
Afirmó que fue el pasado 3 de marzo, cuando se encontraba en la colonia Patria Nueva, que supuestos elementos de la Fiscalía lo agredieron físicamente para arrebatarle de los brazos a su hija de dos años de edad, sin que se presentara un documento que validara su actuar, ya que él cuenta con la guarda y custodia de la menor por parte del Juzgado Cuarto de lo Familiar.
Asegura que el día de los hechos, tanto la madre de su menor de nombre Laura “N”, como los familiares de esta, participaron en lo que acusa como privación ilegal de la libertad.
En medio de la gresca y tras ser golpeado para arrebatarle a su hija, el hombre pudo abordar la góndola de la camioneta en donde esta fue subida.
En el camino a las instalaciones de la Fiscalía Metropolitana, la camioneta se detuvo, se bajó uno de los policías: “Me ordenó que me hincara, a lo que yo me negué rotundamente; entonces él sacó un arma de fuego y me la puso en las costillas, diciéndome que le bajara de huevos, que yo obedeciera y que llegando a donde me iban a llevar se iba a divertir conmigo”.
Juan sostiene que momentos después llegaron a las oficinas de la Fiscalía Metropolitana, en donde exigió que se argumentara de manera legal la razón por la que se le estaba retirando a su hija, siendo que esta no es una autoridad competente para hacerlo, o al menos eso mismo le indicaron cuando acudió a solicitar el apoyo para poder proteger a su menor de edad.
Señala que la madre de la menor es una mujer que no cuenta con la guarda y custodia, derivado de que padece alcoholismo y además actúa de manera violenta, por lo que él mismo cuenta con pruebas en video que en su momento entregará a la autoridad competente.