En el Hospital de Especialidades Pediátricas "Dr. Manuel Velasco Suárez" (HEP), de Tuxtla Gutiérrez, se sospechan entre 7 y 10 probables casos de cáncer infantil a la semana.

Así lo dio a conocer Mónica Morales de Maturana, presidenta del voluntariado del hospital, quien lleva 10 años trabajando directamente con las familias que enfrentan esta difícil situación.

Acompañamiento

Destacó que es una labor muy importante para las familias dentro del hospital: "Para nosotras, como miembros de la sociedad, es constante nuestro aprendizaje y nuestra participación en cualquier situación vulnerable en el estado; es superimportante para nosotras estar de cerca con las personas afectadas, porque podemos cambiar vidas dentro del hospital y podemos hacer más leve todo su proceso dentro de su enfermedad".

Apuntó que en compañía del cáncer se presentan otras enfermedades, lo que hace más difícil que el hospital pueda atender por completo todos los casos.

Comentó que en el tema del cáncer es muy importante que los pacientes no pierdan la continuidad de sus tratamientos, aunque en la mayoría de los casos las familias son de comunidades lejanas, por lo que muchas veces se ven en la necesidad de dejar a sus demás hijos en sus casas, además de que se ven obligadas a vender sus pertenencias y propiedades para poder costear los gastos que significa la enfermedad. Todo esto se suma para que se haga "más fácil" dejar el tratamiento a la mitad del camino, "porque además empiezan a ver a sus hijos flaquitos, pelones, con llagas en el cuerpo o su boca, y es una decisión muy fuerte".

Por tanto, la labor del voluntariado es hacer que todo ese esfuerzo sea lo menos agresivo para la familia y lo menos dramático para los padres.

Asegura que cuando los papás piden ayuda al voluntariado, lo hacen con una desesperación muy fuerte, a pesar de que no se puede hacer nada en la parte médica, pero que sí se hace en el hospital, que es uno de los más sólidos en todo el país.

Comentó que en el caso del voluntariado se hace una administración de recursos muy transparente para que las personas que deciden apoyar tengan la confianza de que sus aportaciones llegan a quienes en verdad lo necesitan.

Asimismo, reconoció que lo que más se necesita es dinero, porque se deben costear los gastos de transporte, estadías largas en la ciudad, debido a que a veces los albergues no se dan abasto. También se pueden aceptar donaciones de juguetes, ropa, colchones, toallas sanitarias, y lo demás que se dese donar, porque todo es muy útil.