Descubren la legendaria ciudad del Jaguar Blanco

Descubren la legendaria ciudad del Jaguar BlancoLos arqueólogos expresaron su emoción y entusiasmo por estos hallazgos. Cortesía

Bajo la espesura de la Reserva de la Biosfera Montes Azules, un equipo interdisciplinario liderado por el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) ha confirmado el hallazgo de Sac Balam (Jaguar Blanco), la última capital del reino lacandón choltí que resistió por dos siglos el avance español.

El anuncio se realizó durante la presentación del documental “La ciudad perdida del Jaguar Blanco”, producido por Discovery Channel, en el Museo Regional de Chiapas, ante arqueólogos, académicos y estudiantes.

El Dr. Josuhé Lozada Toledo detalló cómo modelos predictivos con Sistemas de Información Geográfica (SIG) permitieron ubicar el sitio.

Basado en crónicas del siglo XVI, como los escritos de fray Diego de Rivas, calculó que Sac Balam se localizaba a 12 leguas (50 km) al sureste del lago Miramar, en un valle entre ríos.

“La resistencia lacandona aprovechó la selva como escudo natural. Nuestros modelos consideraron variables como pendientes, hidrología y rutas de desplazamiento con cargas de 30 kg”, explicó Lozada, cuyo trabajo fue validado con recorridos de campo y tecnología LiDAR que “desnudó” la vegetación, revelando estructuras ocultas.

Evidencias en la selva

La Dra. Yuko Shiratori compartió los primeros resultados de las excavaciones realizadas en el sitio, ahora bajo el proyecto “Salineros Mayas”. A pesar de los desafíos de trabajar en la Reserva de la Biósfera Montes Azules, el equipo, con el apoyo de estudiantes de universidades y guías locales, realizó sondeos y utilizó detectores de metales.

Los hallazgos preliminares son prometedores y concuerdan con las descripciones de las crónicas coloniales de 1694.

Se encontraron muros de piedra de hasta 16 metros de largo que no utilizaban mortero, una técnica constructiva maya, y grandes estructuras en la cima de un cerro de hasta 36 metros.

Las crónicas hablaban de tres casas grandes en el centro del asentamiento y edificios ceremoniales en forma de U en la colina.

También se recuperaron fragmentos cerámicos, incluyendo una figurilla hueca con rostro de mono y estilo postclásico, así como otros tiestos que sugieren una transición del Clásico Tardío al Postclásico, también con detectores de metales encontraron objetos de épocas coloniales, como clavos y una olla de aluminio rota.

“La arquitectura sin mortero y las ofrendas confirman ocupación durante la resistencia. Sac Balam fue un núcleo de 100 casas y tres estructuras ceremoniales”, señaló Shiratori.

Resistencia

El Dr. Brent Woodfill introdujo la historia de los lacandones choltíes, distinguiéndolos de los lacandones contemporáneos que conocemos hoy. Los primeros hablaban cholí, un idioma descendiente del ancestro lingüístico de los glifos de la época Clásica en el sur del mundo maya, desde Palenque hasta Tikal.

Fueron conocidos por su resistencia y desconfianza hacia los españoles, quienes intentaron someterlos en varias ocasiones entre 1525 y 1586, enfrentando una fuerte oposición.

Los lacandones choltíes abandonaron su antiguo territorio alrededor del lago Miramar en 1586, huyendo hacia el sureste para fundar Sac Balam. Este nuevo asentamiento se estableció en una zona de poca elevación (entre 250 y 400 metros sobre el nivel del mar), protegida por fronteras naturales, a unas 12 leguas (aproximadamente 50 kilómetros) del lago Miramar.

El interés del Dr. Woodfill en los lacandones se intensificó a partir de informes españoles que describían su producción de sal en Salinas de los Nueve Cerros, un sitio crucial para su subsistencia y comercio.

Los arqueólogos expresaron su gran emoción y entusiasmo por estos hallazgos, que confirman el valor de los modelos predictivos y las tecnologías avanzadas, y abren una ventana a la vida de uno de los grupos más resilientes del México prehispánico y colonial.