Desertificación y sequía, daños que van en aumento

El cambio de uso de suelo y la variabilidad climática que genera largos periodos de sequía y poca humedad, han provocado al paso de los últimos años la desertificación de los suelos en varias regiones, por lo que investigadores han comenzado a estudiar como revertir esta tendencia.

Marcelino García Benítez, investigador del Conahcyt, ha analizado dos tipos en el ámbito del paisaje, desde la integración geográfica de todos los elementos hasta los factores que inciden principalmente en este problema.

Factores

“Se deriva de la presencia de humedad, tanto del Océano Pacífico como del Golfo de México, por fenómenos de la variabilidad climática global, la desertificación que se puede identificar que está basada principalmente en periodos de humedad relativa que se puedan presentar en algunas áreas a nivel local y regional”, dijo Marcelino García.

Indicó que lo que se vive son periodos vinculados directamente con la variabilidad del estado meteorológico, “en algunos casos sí tiene una incidencia directa sobre el cambio de uso de suelo; si se cambia la cobertura del suelo se genera una inestabilidad de la estructura y obviamente también un proceso de aceleración de la erosión”, dijo.

“Pero por el otro lado tiene que ver con esta falta de humedad relativa en la superficie o en los ecosistemas que derivan en esta resequedad ambiental, y que generan estos cambios”, expresó.

Afectaciones

En el caso de Chiapas esto se presenta más en el Norte por el cambio de suelo que se está dando para intensificar otras actividades económicas, como la agricultura y la ganadería. También están aquellos puntos donde no hay un cuidado ambiental estratégico.

La desertificación se ha agudizado en la medida que se ha cambiado el uso de suelo, hay investigaciones de miembros del Ecosur que indican que esta acción ha generado que los suelos ya no filtren el agua de las lluvias, sino que escurran, modificando la cobertura vegetal; esto se puede ver en lugares como en Lacandonia