Solamente unos mil migrantes, de un total de casi ocho mil que iniciaron la caravana que partió de Tapachula el pasado 30 de octubre, permanecen unidos y van a continuar su caminar hacia el centro del país.
Estos permanecen varados en Mapastepec, de donde pretenden salir hoy domingo hacia el municipio de Pijijiapan, tras descansar por 48 horas, ya que muchos enfrentan problemas por el cansancio.
El director de la organización Pueblos sin Fronteras, Irineo Mujica Andrade, reconoció que el Gobierno Federal logró desactivar la caravana ofreciendo atención a las familias, pero hasta el momento solamente han recibido a 500 personas, principalmente niños, mujeres y adultos.
Asistencia médica
Dijo que personal de la Cruz Roja acudió al parque central, en donde permanecen resguardándose para curar a algunas personas y, al mismo tiempo, acusó al Instituto Nacional de Migración (INM) de insensible ante la crisis migratoria que se está enfrentando en la frontera sur del país.
“Seguiremos caminando y desafiando la política criminal y suicida para todos nosotros”, indicó y lamentó que el Gobierno Federal carezca de una política migratoria definida, sino “una fábrica de cobro de cuotas al migrante”.
Dijo que a pesar de que ya no cuentan con la protección de ninguna autoridad ni de los organismos de derechos humanos, los poco más de mil migrantes de la caravana continuarán caminando hacia el centro del país, con la esperanza que las autoridades los atiendan y les otorguen documentos de legal estancia.