El Instituto Mexicano del Seguro Social-Bienestar (IMSS-Bienestar) realizó una exposición culinaria con un enfoque de psiconutrición, dirigida a usuarios de oncología y consulta externa en el hospital general Dr. Jesús Gilberto Gómez Maza.
Entre las recomendaciones expresadas se encuentra comer acompañando en un lugar tranquilo y alejado de la cocina, en plato de postre y masticando despacio para favorecer la digestión; evitar olores ambientales fuertes mientras se come y repose; sentarse en la mesa en una postura que facilite la ingesta de alimento, espalda recta, hombros hacia delante, pies firmes y apoyados en el suelo, así mismo emplear ropa holgada que no comprima el abdomen.
Desde la psiconutrición se recomienda tener entre cinco a seis comidas ligeras diarias, en las que se respeten los gustos y preferencias del paciente, al mismo tiempo incentivar la creatividad en la preparación, presentación, textura y variedad de los platos; tomar los alimentos con mayor aporte energético en los momentos de más apetito, preferiblemente en el desayuno, así como flexibilidad en los horarios de la ingesta.
Por último, beber alrededor de seis a ocho vasos diarios de agua u otros líquidos (infusiones, zumos o batidos), a pequeños sorbos y fuera de las comidas.
Según la Sociedad Española de Oncología Médica, se considera fundamental insistir en la importancia de la prevención primaria del cáncer, el diagnóstico precoz y el papel de los test genéticos en familias susceptibles de padecer cáncer y mantiene un compromiso con los enfermos de cáncer en todas las fases de su enfermedad, incluso después de la finalización de los tratamientos médicos.
Desde este sentido, la psiconutrición coadyuva a evitar la desnutrición y las complicaciones que se pueden derivar de un paciente con cáncer, mejora la tolerancia a los tratamientos antineoplásicos y favorece su eficacia, así como la calidad de vida del paciente.