José Luis Castro Aguilar / CPEl 3 de septiembre, enterado del acta que declaró libre e independiente a la ciudad de Comitán, don Juan Nepomuceno Batres, gobernador-intendente, jefe político superior de la provincia de las Chiapas y presidente del Ayuntamiento de Ciudad Real de Chiapa, convocó a sesión de cabildo para tratar lo relativo a la independencia de la provincia. A esta reunión de trabajo asistieron José Ignacio Larráinzar, José Diego Lara, Julio Flores, José Nicolás Osuna, Esteban Gordillo, José Vives, Eugenio José Ruiz (secretario) y el propio Juan Nepomuceno Batres.
Después de una amplia discusión sobre las ventajas y los inconvenientes de declarar libre e independiente a la provincia de las Chiapas, el Noble Ayuntamiento de Ciudad Real de Chiapa, capital de la provincia, acordó declarar la independencia de la provincia conforme al Plan de Iguala o de las Tres Garantías propuesto por el generalísimo Agustín de Iturbide; para ello se fijó el día 4 de septiembre para que se hiciera la proclamación de la independencia de la Provincia de las Chiapas “con la solemnidad y pompa que corresponde, con asistencia de mucha tropa y música de ella y un repique general”. Así se acordó y así se cumplió. Por tal motivo, el martes 4 de septiembre de 1821 se proclamó la Independencia de Chiapas.
En la sesión de cabildo del jueves 6 de septiembre, el Ayuntamiento Constitucional de Ciudad Real acuerda que el próximo día sábado 8 de septiembre del mismo mes se hiciera el juramento solemne de la independencia de la provincia.
El 8 de septiembre, tal como se había acordado en la sesión anterior, a partir de las ocho de la mañana se reunieron los integrantes del Ayuntamiento de Ciudad Real en las casas consistoriales, así como los prelados seculares y regulares, funcionarios públicos y militares.
El acta de juramento de la Independencia de Ciudad Real de Chiapa, dice: “En la mesa principal se hallaba colocado un Cristo y el libro de los Santos Evangelios, que leyó el señor provisor y vicario capitular, gobernador del Obispado por fallecimiento del ilustrísimo señor doctor don Salvador Sanmartín y Cuevas, Br. don Lino García, y dicho señor gobernador intendente se acercó a la mesa y poniendo la mano izquierda sobre el Santo Evangelio y su derecha en el puño de la espada, le fue tomado el juramento por el mismo eclesiástico bajo los términos siguientes: ¿Juráis a Dios y prometéis bajo la cruz de vuestra espada observar la santa religión católica, apostólica romana? Sí juro. ¿Juráis hacer la independencia del Imperio, guardando para ello la paz y la unión de europeos y americanos? Sí juro. ¿Juráis la obediencia al Sr. D. Fernando VII, si adopta y jura la Constitución que haya de hacerse por las Cortes de esta América Septentrional? Sí juro. Si así lo hacéis, el Señor Dios de los ejércitos y de la paz os ayude; si no os lo demande”. Posteriormente, don Juan Nepomuceno Batres, en calidad de intendente y de presidente del Ayuntamiento, les tomó el juramento tanto a los integrantes del cabildo como a los empleados de gobierno, a los oficiales y al comandante de las compañías. Enseguida se dirigieron a la iglesia catedral para asistir a la misa y sermón que predicó fray Vicente Vives, padre provincial de la orden de Santo Domingo. En acción de gracias se cantó un solemne Te Deum y les fue tomado el juramento tanto al clero secular como al pueblo, mediante la fórmula indicada. Al término de la misa, los integrantes del Ayuntamiento regresaron a las casas consistoriales para celebrar dignamente el feliz acontecimiento histórico en que los chiapanecos rompieron las cadenas del colonialismo hispánico y rectificaron su historia y su destino.
Tuxtla proclama su independencia el 4 septiembre
Mientras tanto, el 4 de septiembre, a propuesta del síndico procurador don José Palacios y Corona, y en sesión de cabildo, el Ayuntamiento Constitucional de la Villa de Tuxtla aclamó la Independencia que habían proclamado Comitán, Zapaluta y Ciudad Real, y en esa misma sesión acordaron jurar la Independencia tanto de la villa como de la provincia de las Chiapas para el día 8 de septiembre, como lo exigía el pueblo tuxtleco a través de don Salvador Peralta, el padre Manuel Antonio Figueroa y el capitán Joaquín Miguel Gutiérrez. En los oficios que giraron las autoridades de la villa de Tuxtla a los pueblos de su jurisdicción (Chiapa, Ocozocoautla, Cintalapa, entre otros) figuran como anexos el acta de Independencia de Tuxtla y el pedimento del síndico procurador. El acta aparece firmada por José Eusebio Gutiérrez, Alcalde; Esteban Roger, depositario de la primera vara, Vicente Espinosa, Manuel Méndez, José Gamboa, Vicente Trujillo, José Esteban González, Juan Bautista de Torres y Pedro Fernández Bustamante, regidores, así como por don Salvador Madariaga, quien fungió como secretario.
Chiapa proclama su independencia el 7 septiembre
El 7 de septiembre, el Ayuntamiento Constitucional de Chiapa (hoy de Corzo) proclamó la independencia del pueblo y la juró solemnemente el día 15. Mediante acta de fecha 29 de octubre de 1821, el Ayuntamiento de Chiapa otorgó amplios poderes al bachiller Pedro José de Solórzano, para que tratara lo relativo a la independencia de la provincia de las Chiapas con don Agustín de Iturbide.
Guatemala proclama su independencia hasta el 15 de septiembre
El 15 de septiembre de 1821, la Capitanía General de Guatemala proclama su Independencia de la Corona Española a invitación de los Ayuntamientos Constitucionales de Ciudad Real, Comitán y Tuxtla. El acta histórica de Centro América, dice: “Siendo públicos e indudables los deseos de la independencia del Gobierno Español, que por escrito y de palabra han manifestado el pueblo de esta capital; recibidos por el último correo diversos oficios de los Ayuntamientos Constitucionales de Ciudad Real, Comitán y Tuxtla, en que comunican haber proclamado y jurado dicha independencia y escitan a que se haga lo mismo en esta ciudad”. Después de haber leído y discutido el contenido de los oficios, la Diputación Provincial, el clero, los funcionarios, el Ayuntamiento, el Consulado, el Colegio de Abogados y de más representantes de la sociedad, se proclamó la Independencia de la Capitanía General de Guatemala.
Debido a que el Acta de Independencia de Guatemala, o Capitanía General de Guatemala, consideraba que las provincias que la formaban debían enviar sus representantes o diputados para que concurrieran a la capital y formaran un Congreso Nacional, que era el que iba a resolver el punto de la independencia general de la Capitanía y, en su caso, definir la forma de gobierno y la ley fundamental que la regiría, el 26 de septiembre el Ayuntamiento de Ciudad Real de Chiapa declaró: “Que la Provincia de Chiapa que se ha declarado independiente espontáneamente no reconoce otro gobierno que el del Imperio Mexicano conforme a los tratados celebrados por los Excelentísimos señores (Agustín de) Iturbide, y O’donojú”.
El 21 de octubre de 1821, con el deseo de fortalecer el derecho de su libertad, el pueblo de Comitán jura la Independencia de la ciudad y su comprehensión. Fray Matías de Córdoba recibió el juramento que hicieron tanto las autoridades civiles como el pueblo. Después de cantarse un Te Deum en acción de gracias al Todopoderoso y Señor de la Paz, fray Matías de Córdoba pronunció un enérgico discurso sobre los beneficios de la Independencia.
El 26 de octubre, la Diputación Provincial de la provincia de las Chiapas se dirige a don Agustín de Iturbide para felicitarlo por su reciente nombramiento de presidente del Supremo Consejo de Regencia del Imperio Mexicano, y a la vez le solicitan que la provincia de las Chiapas sea parte del naciente Imperio Mexicano, comunicándole que para ello han nombrado al presbítero bachiller don Pedro José de Solórzano, diputado de la provincia de Ciudad Real de Chiapa. Días después, en una carta sin fecha, don Pedro José de Solórzano se dirige a don Agustín de Iturbide y le “suplica se digne decretar la perpetua incorporación de Chiapas al pacífico Seno del Imperio...”.
Ratificación de la independencia de la provincia
En sesión del 12 de noviembre de 1821, la Junta Soberana Provincial de Ciudad Real de Chiapa ratifica su independencia tanto de la Corona Española como de la Capitanía General de Guatemala.
Chiapas se incorpora al Imperio Mexicano
Las súplicas del bachiller don Pedro José de Solórzano pronto tuvieron los efectos deseados. El 16 de enero de 1822, por decreto de la Regencia del Imperio Mexicano se declara incorporada la provincia de las Chiapas al Imperio Mexicano, firmando como presidente de la Regencia, don Agustín de Iturbide.
A principios de marzo de 1822, regresa a Chiapas don Pedro José Solórzano después de haber cumplido su delicada misión que se le había encomendado el 26 de octubre de 1821: solicitar la agregación de Chiapas al Imperio Mexicano. En el informe que rindió a sus compatriotas se dirigió de la siguiente manera:
“Ymperiales Chiapanecos: predilecta patria mía: nada quiero deciros de las seiscientas leguas de camino; de mis cansancios, riesgos, y otros sinsabores de mi dilatada expedición por que engolfado en los respetables objetos de mi encargo, sólo debo hablaros del felis excito que el Señor sabe dar á las empresas por medio de los más pequeños instrumentos. Ya están dichosamente incorporados al Imperio Mejicano, de donde habéis descendido, y cuyos generoso aliento, y natibo idioma, aún conserbais por honroso distintibo ya he cumplimentado á vuestro nombre al Soberano congreso, á la serenísima Regencia, y Serenísimo Señor don Agustín Yturbide, Héroe nunca bien elogiado, prudente, afable, y circunspecto”.
Tales fueron los acontecimientos que permitieron a Chiapas reasumir su derecho de libertad y de soberanía, después de casi tres siglos de colonialismo español; gracias al espíritu valiente y decisivo de los próceres fray Matías de Córdoba y fray Ignacio Barnoya, autores intelectual y material, respectivamente, de la independencia de Chiapas y que andando el tiempo se convirtieron en los paladines de la independencia de la América española.