El Tigre del Sacramento celebra el Corpus Christi

La danza del Calalá es una de las festividades y expresiones religiosas más importantes, con antecedentes prehispánicos, que se realiza en el municipio de Suchiapa, en honor al Corpus Christi (Cuerpo de Cristo) y al Santísimo Sacramento del Altar.

Previo a este acontecimiento, familias enteras se preparan con antelación para elaborar sus trajes y máscaras que estos días portan con orgullo, dejando en las manos de los artesanos vetustos del pueblo la encomienda de realizar cada pieza con fervor.

Tradición

Don Mariano o “el creador del gigante”, como también se le conoce, es uno de los tantos menestrales que ha dedicado gran parte de su vida para que cada embozo sea de calidad y tenga los elementos necesarios como la cruz, el cual simboliza un enlace entre la religión cristiana y la pagana.

En este escenario, el convite, con brío grita “¡jule jule!”; marcado por el son del tambor, niños y hombres caracterizados de tigre caminan por diversas calles del pueblo, con rumbo a la cofradía donde se ubica la imagen del Santísimo Sacramento.

Vienen acompañados del Venado, El Gigante (Quetzalcóatl) y los Chamulas con el rostro pintado de tiza, cargando en el hombro una iguana que a simple vista parece deshidratada.

Los hombres-tigre -devotos a sus santos- expresan su fe por medio de esta danza conocida como Calalá, donde los chamulas tratan de arrebatar la cola al felino mientras hace reverencia.

Los otros personajes congregados encierran el baile en un círculo de paz, donde piden al Sacramento lluvia que abunde en la cosecha y salud para sus familias.