Ante la llegada de las próximas elecciones extraordinarias a realizarse el 3 de abril, en los municipios de Venustiano Carranza, Honduras de la Sierra, Siltepec, El Parral, Emiliano Zapata y Frontera Comalapa, el arzobispo de Tuxtla Gutiérrez, monseñor Fabio Martínez Castilla, pidió a los pobladores de esos seis municipios de Chiapas que vean esto como una oportunidad para buscar el bien común.
Durante la acostumbrada conferencia dominical, afirmó que las elecciones no son para buscar intereses personales o políticos, sino para buscar lo que el pueblo necesita.
Explicó que es necesario procurar escoger al mejor servidor posible, porque siempre las elecciones requieren un momento de discernimiento, el cual, dijo, se da mediante una oración, por lo que recomendó que hasta cierto punto hay que preguntarle al Señor: ¿por quién votaría (él)?
Martínez Castilla aconsejó a los habitantes de estos municipios a hacer un análisis de conciencia y no buscar la satisfacción de intereses personales. “No debo buscar mis intereses de saber con quién me va ir mejor a mí, sino quién podría ser el mejor presidente para que el municipio salga adelante”, comentó.
Además reconoció que es fácil ver las obras y la vida de un candidato, ya que si un candidato ha sido recto toda su vida, eso quiere decir que se tiene la certeza de que en el encargo puede ser recto u honrado, pero si ha sido chueco toda su vida, o como se dice en el pueblo, “rata”, se tiene la certeza de que se va a llevar todos los recursos del pueblo.
Apuntó que es necesario conocer la persona del candidato así como su ideología de partido, por lo que si uno atenta contra la naturaleza o si no hay amor a la Tierra, a la familia o a los valores, ¿qué esperamos?, y que no sea ocasión de pelea. Retomó una frase de su abuela que le decía: “Total, ellos no nos dan de comer, nosotros tenemos que seguir trabajando”. En este mismo contexto, dijo que este lunes 28 de marzo se están cumpliendo 40 años de la erupción del volcán Chichonal, el cual dejó en el norte de nuestro estado un triste saldo de muerte y damnificados, además de muchos desplazados que tuvieron que salir de sus comunidades para poner su vida a salvo.
A cuatro décadas del acontecimiento, pidió estar unidos en las eucaristías conmemorativas que se estarán celebrando en las parroquias de aquella zona -como Chapultenango y Francisco León-, para que pidamos que el recuerdo de este hecho ayude a asumir una constante cultura de prevención y cuidado.