En una gira de trabajo por diferentes municipios de Chiapas, el vicecoordinador de Morena en la Cámara de Diputados, Alfonso García Cuéllar, hizo un extenso llamado a los chiapanecos a participar en la elección histórica del 1 de junio, en donde por primera vez en la historia del país el pueblo elegirá al Poder Judicial.
Expuso que este proceso ha sido anhelado desde 1814 de tener un tribunal que imparta verdadera justicia, con jueces y juezas honestos que vean por los débiles, por los vulnerables y que no se dejen someter por los arbitrarios, por los millonarios.
El legislador subrayó que, tras una resolución del Tribunal Electoral, su partido ahora puede difundir información sobre los puestos en juego: "Tenemos 17 días para intensificar la campaña, ningún ciudadano debe quedarse sin saber qué se elige el 1 de junio, la meta nacional es superar los 25 millones de votantes".
Entre las prioridades postelectorales, García Cuéllar destacó tres ejes: "Una cirugía de caballo al Ministerio Público", donde la ciudadanía sufre "desdén y humillación".
Se deberá fortalecer la Defensoría Pública: "Las personas humildes no tienen recursos para abogados privados. La defensa de oficio debe ser sólida".
Una reforma al sistema penitenciario: "Las cárceles deben formar, no castigar ni degradar".
Cargos
En el proceso electoral del 1 de junio se definirán:
En el Tribunal de Justicia de la Nación: 9 integrantes (5 ministras y 4 ministros).
En el Tribunal de Disciplina Judicial: cinco magistrados (3 mujeres, 2 hombres).
En la Sala Superior del Tribunal Electoral: un magistrado y una magistrada.
Mientras que en Chiapas serán electos ocho magistrados y magistradas de tribunales de circuito y 11 jueces y juezas en materia laboral, civil y mixta del circuito judicial número 20.
García Cuéllar confirmó que este proceso es parte de una reestructuración que concluirá en 2027, cuando se consolide la elección de todos los cargos judiciales federales y locales. "Es el primer paso para que la justicia sea un derecho, no un privilegio", concluyó.
En el estado de Chiapas, la campaña busca combatir la desinformación en zonas rurales y urbanas, donde persisten rezagos en acceso a justicia.
Con ello, Morena apuesta a movilizar a sus bases ante el desafío de legitimar un sistema judicial históricamente cuestionado.
