En Chiapas, aves como las guacamayas, homínidos como los monos arañas e incluso felinos de gran tamaño como los jaguares, son extraídos para el tráfico de especies, su ausencia genera daños irreparables al medio ambiente. La fauna silvestre no puede ser considerada mascota, pues necesita a su comunidad y su entorno natural para sobrevivir. Este fin de año, invitan a decirle no al tráfico ilegal.
Chiapas, por su rica biodiversidad, se ha convertido en un punto álgido del tráfico ilegal de especies. Lo que pone en grave riesgo la supervivencia las mismas. La Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa), ha detectado como una mala costumbre que, como parte de los regalos navideños y de fin de año, se regale flora y fauna.
Si bien hay establecimientos que poseen documentación para realizar estas compras y ventas, con especies muy específicas. Cuando se trata de especies de flora y fauna silvestre y cuando son consideradas endémicas, amenazadas o en peligro de extinción, las penas son severas, van desde uno a nueve años de prisión e incluso, un pago de hasta siete millones de pesos por poseer, acopiar, vender o almacenar un ejemplar.
Especies más traficadas
Se tiene documentado en la investigación “Vendidos sin piedad”, elaborado por el Centro para la Diversidad Biológica, que “Chiapas es uno de los principales estados en los que se presenta recolección ilegal de vida silvestre”. Son tortugas, iguanas, serpientes, orqui´deas, cocodrilos, primates, jaguares y otros felinos las principales extracciones.
Con cuantiosas ganancias para los traficantes, pues vendedores en la Ciudad de México, por poner un ejemplo, ofrecen monos hasta en 50 mil pesos, de acuerdo a esta investigación.
Problemática
La problemática radica en la tasa de mortalidad, la cual excede el 75 % de los ejemplares antes de llegar al consumidor final. Captura, transporte y cautiverio suelen ser en condiciones deplorables, causando sufrimiento y muerte a miles de animales.
Denunciar si tienes conocimiento de actividades de tráfico ilegal de especies, es la invitación continua de las autoridades. Pero sobre todo, se exhorta a no comprar animales silvestres. Contribuye a disminuir la demanda y, por ende, el tráfico ilegal.