Exploran proyecto sobre manejo del fuego

Pável Palacios Chávez, director regional Frontera Sur, Istmo y Pacífico Sur de la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), informó se delinea un proyecto con El Colegio de la Frontera Sur (Ecosur) respecto al manejo intercultural del fuego, en la que se contempla la importancia de dicho elemento sin olvidar la preservación de la biodiversidad.

El director informó de la coordinación entre la Comisión Nacional Forestal (Conafor), Secretarías del Medio Ambiente e Historia Natural (Semahn) y Protección Civil (PC) respecto a la prevención y combate de incendios a nivel estatal; en especifico dentro de las áreas naturales protegidas.

Por tanto, las instancias han trabajado en brigadas comunitarias de prevención y combate, así como la generación de otras acciones como son el financiamiento para la construcción de brechas cortafuego.

Acciones

Las brechas funcionan como barrera artificial a las llamas, consisten en la remoción de material combustible y la línea negra se refiere a la quema de este material, el objetivo es delimitar un perímetro que mantenga áreas específicas a salvo del fuego.

Palacios Chávez consideró fundamental el monitoreo comunitario de la biodiversidad en las áreas de protección especial, así como la concientización sobre la presencia de especies en peligro de extinción.

“Este año (2024) se presentaron varios, porque afortunadamente coincide que gran parte del territorio en Chiapas es Área Natural Protegida (ANP), por lo que trabajamos para limitar lo más posible la expansión de dichos incendios”, dijo.

No obstante, Pável Palacios sumó una estrategia más para la contención de incendios siendo el manejo intercultural del fuego en la que se trabaja junto a Ecosur.

“Es vital conocer el manejo que tienen las comunidades respecto al fuego, por lo que se trabaja en establecer estrategias para que dicho manejo sea responsable”, añadió.

Por último, el director enfatizó la calendarización de quemas prescritas por parte de algunas comunidades, lo que beneficia a la disminución de material combustible. Estas quemas son una herramienta fundamental para el manejo del fuego y por ende el manejo forestal de los ecosistemas, siendo una actividad que facilita el control de los combustibles forestales desde una perspectiva de costo-beneficio, reduciendo los costos frente al método mecánico.

Así mismo deben implementarse buscando maximizar los efectos benéficos del fuego, como los ecológico-silvícolas (por ejemplo, aumento de diversidad de especies del sotobosque, hábitat para la fauna, regeneración de arbolado o el incremento en área basal y volumen de especies maderables), los sociales (por ejemplo la preparación de terrenos para la siembra o la implementación de plantaciones), y los de prevención y combate de incendios (reducción de combustibles forestales y de peligro de incendio); así como llevando al mínimo los efectos negativos de todo tipo, por ejemplo, los ambientales (erosión, emisiones, mortalidad de fauna, entre otros), sociales, políticos y económicos.