Con el objetivo de dotar a los niños y niñas de herramientas y conocimientos sobre el cuidado de su entorno inmediato, se realizó el curso de verano “Guardianes de Montebello”, iniciativa dirigida a la niñez de comunidades aledañas al parque nacional Lagunas de Montebello.
Sembrar la semilla
Con el firme propósito de sembrar la semilla de la conservación en las nuevas generaciones, la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp) concluyó con éxito el curso de verano, integrando el saber comunitario tradicional con la educación ambiental formal.
El proyecto, impartido por el personal del área natural protegida, se llevó a cabo en las localidades de Yalmutz, San Nicolás y Tziscao, ubicadas en los municipios de La Independencia y La Trinitaria.
Durante el curso, los pequeños guardianes aprendieron sobre la inmensa riqueza natural que resguardan sus propias localidades y el parque nacional.
Temas como la crucial cultura del agua, la importancia de la reforestación y el manejo adecuado de los residuos sólidos formaron parte esencial de esta formación, buscando generar no solo conciencia sino también un sentido de pertenencia y responsabilidad.
Planificación
La estrategia destacó por la construcción de alianzas comunitarias e institucionales. El esfuerzo conjunto de los ayuntamientos de La Independencia y La Trinitaria, a través de sus direcciones de Ecología, Medio Ambiente y Cuencas, la Facultad de Ciencias Administrativas Campus VIII de la Benemérita Universidad Autónoma de Chiapas (Unach), y el apoyo de establecimientos comerciales locales, fue fundamental para materializar esta iniciativa.
Para la Conanp, la educación ambiental es la piedra angular para integrar los conocimientos comunitarios con la conservación de los recursos naturales.
Este curso refrenda el compromiso de la institución de trabajar desde las bases, con las comunidades y comenzando desde la edad temprana, para formar agentes de cambio que se conviertan en los verdaderos guardianes de Montebello y de la herencia natural de México.