Trabajadores del Ayuntamiento de Cacahoatán manifiestan su inconformidad ante la proximidad en el pago del aguinaldo, ya que documentos entregados a medios de comunicación exponen que el alcalde Víctor Alfonso Pérez Saldaña, el secretario de Obras Públicas y el tesorero Manuel Yoc se asignaron grandes cantidades por este concepto, mientras que ellos viven en la incertidumbre y podrían dejarlos esperando el pago.
Señalan que estos tres funcionarios obtienen aguinaldos muy por encima de lo permitido mediante situaciones irregulares. El rumor que se ha esparcido es que no hay recursos y que podrían tener que esperar para recibir la prestación de ley, pues sin pudor alguno se asignaron cantidades extraordinarias.
Un ejemplo es el director de Obras Públicas, Carlos Moreno “El Yayo” a quien pretenden proyectar como el próximo candidato oficial a la alcaldía, cuyo sueldo mensual es de 34 mil 241.78 pesos, una compensación aproximada mensual de 50 mil pesos y un aguinaldo o gratificación de fin de año estimado en 158 mil 512 pesos con 67 centavos, lo que sumaría casi un cuarto de millón de pesos en diciembre.
Para este trío de funcionarios que manejan los destinos de los recursos públicos de Cacahoatán la situación no es diferente. El alcalde Víctor Pérez Saldaña supera por mucho la cifra del titular de Obras Públicas, mientras que Manuel Yoc, quien tiene el manejo del dinero, el monto a recibir es muy alto, en comparación con los trabajadores que han sido relegados.
Dentro del palacio municipal el malestar es evidente, los empleados se han enterado por sus mismos compañeros de la situación que manejan sus jefes, que no se midieron al aprobarse esos pagos, mientras que la situación con ellos es de incertidumbre.
A pesar del manejo hermético que quisieron darle a los aguinaldos, compensaciones y sueldos, nadie sabe cómo le hicieron para autorizárselos en lo que ellos llaman parte de la 4T de austeridad y en la que la administración ha sido cuestionada por las “obras sin rostro” en las que nadie sabe el costo de las mismas.












