Hostigan a familias que venden en el centro de San Cristobal

La agrupación Melel Xojobal, que trabaja con menores, denunció que desde octubre pasado, cuando inició funciones el actual ayuntamiento morenista, se ha registrado "un incremento del hostigamiento e intimidación a familias trabajadoras del centro de San Cristóbal, con la excusa de mejorar la imagen urbana y con la constante discriminación de servidores públicos que dicen que "los niños y niñas trabajadores indígenas afean el centro y andadores".

Comunicado

En un comunicado señaló que "se ha realizado una política de desgaste a familias que viven del comercio en el centro de la ciudad, se les obliga a moverse de lugares, se disminuyen las dimensiones de los puestos de venta afectando la movilidad de las niñas y niños".

Dijo que la noche del pasado 1 de febrero "se realizó un operativo policiaco en el primer cuadro de la ciudad y andadores, acciones nombradas por integrantes de Servicios Públicos del Ayuntamiento como ´reducciones del ambulantaje para la recuperación de espacios públicos´".

Abundó: "En Melel identificamos la presencia de niñas, niños y adolescentes que fueron testigos de detenciones violentas y víctimas de agresiones físicas y psicológicas ejercidas por los elementos de la policía municipal, provocando ansiedad, miedo e inseguridad en ellas y ellos".

Asimismo exponen "estamos a favor de políticas públicas que atiendan las causas principales que afectan a las niñez y adolescencias en el estado, pero nos preocupa que el intento de lograr estos objetivos sea sinónimo de amenazas, detenciones, hostigamiento y persecuciones contra niñas, niños y adolescentes trabajadores", enfatizó Melel.

"Observamos cómo se multiplican las campañas que promueven la desinformación y estigmatización, en las que se usan elementos racistas contra la niñez y adolescencia indígena vulnerando sus derechos y participación", expresó.

Manifestó que "frente a una economía que les excluye y un sistema que explota y discrimina a los pueblos originarios, queremos decir que hay experiencias de niñas, niños y adolescentes indígenas que orientan formas de trabajo familiar dignas, donde aprenden e interactúan con sus tradiciones y lengua materna, sumando fuentes de ingreso que los benefician directamente".