Autoridades migratorias, federales y estatales intentaron detener la caravana de migrantes que partió la madrugada del miércoles de Tapachula, pero no les permitieron quedarse en el domo del barrio Guadalupe en la cabecera municipal de Huixtla, por lo que tuvieron que seguir su camino hasta la población de Villa Comaltitlán.
A la altura del entronque del libramiento de Huixtla y carretera federal, elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) y de la Guardia Nacional, bloquearon la carretera, registrándose un conato de enfrentamiento con los extranjeros que no detuvieron su marcha y penetraron al municipio.
Ante las molestias de la población, no los dejaron quedarse en el domo, en donde han descansado las caravanas que han partido en otras ocasiones.
Se calcula que más de mil migrantes de diversas nacionalidades permanecen en la caravana, mismos que pernoctaron en Huehuetán Estación y la mañana del jueves partieron hacia Huixtla, pero no se pudieron quedar y siguieron su camino, por lo que descansaron en las inmediaciones del centro de control migratorio y aduanal Cerro Gordo y después siguieron hacia Villa Comaltitlán.