Importante registrar sismos de baja intensidad

Para realizar investigación sobre la actividad sísmica, el Centro de Monitoreo Sismológico y Vulcanológico de la Universidad de Ciencias y Artes de Chiapas (Unicach) obtiene información de cuatro estaciones del Servicio Sismológico Nacional (SSN) en Comitán, Tuxtla Gutiérrez, Pijijiapan y Tapachula.

Avith Mendoza Ponce, profesora-investigadora del Instituto de Investigación en Gestión de Riesgos y Cambio Climático y colaboradora de este Centro, comentó que en Tapachula llega la señal de otras tres estaciones que están cercanas al volcán Tacaná.

Aunque es una red amplia para obtener información y seguir estudiando el comportamiento de los sismos en Chiapas, se requiere de más estaciones. Explicó que hay muy pocos registros de eventos telúricos de magnitudes entre dos y 2.9, pero la naturaleza dice que debería ser más que los de magnitud tres a 3.9.

“Quiere decir que nuestra capacidad de detección todavía se puede mejorar”, hay países como Japón y Estados Unidos que cuentan con más de mil estaciones en las zonas con alta actividad sísmica, obteniendo registros de sismos de magnitud cero o menos uno.

Han buscado el acercamiento con el nuevo gobierno para fortalecer la red de monitoreo, considerando la necesidad y la importancia de tener datos más amplios y concretos para investigaciones, prevención y “una tranquilidad de la sociedad”.

“Si no tenemos datos de lo pequeñito, tenemos mucha incertidumbre en ese tipo de cálculos, por eso la primera tarea es instrumentar un estado”. Mencionó también que las grandes construcciones, puentes, extracción de agua del subsuelo, si bien pueden generar vibraciones, no son de riesgo.

Para generar un temblor perceptible, por ejemplo, de hasta magnitud cuatro o cinco, se habla de energía liberada por bombas atómicas. El ser humano no es capaz de generar un sismo alto porque se necesita una cantidad brutal de energía.