La desesperación se hace presente entre miles de migrantes que permanecen varados en Tapachula, están en espera de que les respondan a su cita del programa CBP One.
Ello sumado a que el Instituto Nacional de Migración (INM) y la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) tampoco responde a las solicitudes de regularización de estancia o de asilo, que llevan meses esperando.
Isabel Naranjo, de origen venezolano, lamentó esa situación y dijo que además la falta de dinero para pagar renta y comida hace que se desesperen.
A las oficinas de Regularización de Estancia del INM y provisionales de la Comar, se presentaron miles de ellos este martes para exigir a las autoridades que les brinden una respuesta.
“Estamos desesperados, no avanzan nuestros trámites del CBP One y tampoco el asilo humanitario que estamos solicitando desde que llegamos hace ya tres meses”, dijo la sudamericana que busca llegar a los Estados Unidos junto con otros de sus familiares.
A ellos se suman los extranjeros que a diario cruzan por el río Suchiate y llegan a Tapachula, en donde inician su trámite para tratar de ir al norte del país.
