En nuestro país hay alrededor de 334 empresas Fintech o de tecnología financiera que ofrecen diversos servicios. Se trata de una industria que ha ido en crecimiento en los últimos años, con una regulación que se ha ido actualizando. Junto con Brasil lidera el mercado en América Latina.
Néstor Gabriel López, consultor fiscal y patrimonial, indicó que, México fue el primer país que definió una ley federal para regular a las instituciones de tecnología financiera, de donde deriva la palabra “Fintech”, en ingles Financial Technology.
México junto con Brasil cuentan con importantes factores logísticos para el comercio. En nuestro país se estableció un modelo regulatorio donde la supervisión a través de la Comisión Nacional Bancaria y de Valores (CNBV) y la autorización a través de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP), sean un garante para que las empresas operen.
La primera barrera que se tiene que superar es el conocimiento o idiosincrasia, “el decir es que si meto mi dinero me lo van a robar”. Hay que tener claro que la CNBV es reguladora de estas empresas, es un área de oportunidad, todavía queda en una generalidad.
Es decir, no hay un régimen específico para la tributación de todo el modelo Fintech, hay aspectos generales. Si pagan impuestos cuando se dan los supuestos o hechos generadores de la obligación, “se está construyendo un modelo cada vez más eficaz”.
Los criptoactivos, uno de los servicios que ofrecen las Fintech, fueron creados para que no hubiera una centralización, es decir, que ningún gobierno interviniera para regular este mercado, pero consideró que es mejor que un agente regulador institucional pueda meterse para dar seguridad al público.
“Hay que decirlo, todo lo que hagas con Fintech no está protegido por el Instituto de Protección al Ahorro Bancario, queda fuera, es uno de los grandes lastres”.