Infancias pueden normalizar la violencia: sicóloga

Cuando en la comunidad o ciudad hay violencia, inseguridad o conflictos sociales, como ocurre en algunos puntos de Chiapas y el país en general, hay un impacto en el comportamiento y la salud mental de las infancias, sobre todo si esto restringe sus actividades diarias como ir a la escuela, salir al parque o solo ir a la tienda.

Leticia Pérez de la Cruz, psicóloga infantil y psicoterapeuta Gestalt, refirió que la teoría ecológica, llamada así por un psicólogo alemán, plantea que el bienestar infantil no solo tiene que ver con la familia, que si bien es la base de cada ser humano, también influye todo su entorno, su comunidad; deben existir espacios favorables para el desarrollo de todos.

Incluso la declaración de los derechos de los niños lo menciona: el derecho a una vida libre de violencia en todos los espacios, acceder a una educación de calidad, a lugares de esparcimiento sano y recreación; si no tienen esto, se puede decir que los niños no gozan de un ambiente saludable.

Se altera su rutina, el orden de donde viven, y lo principal, altera a la familia completa, porque la situación indudablemente va a generar estrés en los adultos también, porque se afecta la economía, la rutina social y todo el entorno, aun cuando sea una familia funcional pueden caer en la sobreprotección y alteración de su salud mental.

En otro entorno, cuando la violencia es recurrente llega un punto en que los adultos la normalizan, algo que ha ocurrido en algunos puntos del norte del país; ese comportamiento lo reflejan las infancias, principalmente si tienen acceso a internet y redes sociales, así como otros factores que hacen apología a la violencia, como la música.

La especialista dijo que los niños van aprendiendo a partir de lo que ven, de los patrones de comportamiento de su familia y el contenido que ven y escuchan, por lo que pueden crearse aspiraciones buenas o malas.

No se debe minimizar estos factores en su crianza. Los adultos deben estar conscientes que la mente de un niño apenas está en desarrollo.