La Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH) y Protección Civil (PC) realizaron una visita de supervisión a las instalaciones de la Estación Migratoria “Siglo XXI” en Tapachula, a cargo del Instituto Nacional de Migración (INM).
Francisco Garduño, comisionado del INM, acompañó la visita de supervisión con el propósito de constatar que su operación y los servicios que brinda a la población migrante se apeguen a los principios de respeto a los derechos humanos.
Recorrido
La acción también se realizó con el fin de asegurar que los servicios proporcionados por el INM cumplan con los estándares de seguridad y respeten de manera irrestricta los derechos humanos de las personas migrantes.
También, estuvieron presentes los representantes de la CNDH; Romeo Octavio Ramírez, coordinador de la Oficina Regional en Tapachula; Julissa Esther Briones Magaña, delegada de Protección Civil en el Soconusco y Emmanuel Nivón González, de la Notaría Pública 144 del Estado de Chiapas.
Recomendaciones
La CNDH ha reiterado, en diversas ocasiones, recomendaciones por violaciones a los derechos humanos cometidos dentro de la estación. Entre ellas, la Recomendación 33/2021 por la muerte de dos personas migrantes de nacionalidad haitiana y ghanesa.
Añadió que dichas personas estaban alojadas en las instalaciones de la Estación Migratoria “Siglo XXI”, bajo custodia y responsabilidad de personal del INM, quienes tenían la obligación de proporcionarles atención médica y psicológica en forma oportuna y adecuada, algo que no ocurrió.
Tras una investigación, la CNDH contó con elementos que evidenciaron violaciones a los derechos humanos, a la protección a la salud, integridad y seguridad personal, a la vida, acceso a la justicia y la verdad en agravio de las víctimas.
También, en 2021, el Colectivo de Observación y Monitoreo de Derechos Humanos en el Sureste Mexicano (COMDHSE), externaba su preocupación y denunció actos de tortura a los que fue sometida la población migrante y refugiada en este mismo sitio.
Las organizaciones integrantes del Colectivo mencionaron que, a partir de las denuncias públicas realizadas en distintos medios de comunicación, así como los testimonios de las propias personas, documentaron actos de tortura a los que fueron sometidos hombres detenidos en el módulo masculino, luego de que protestaran por la falta de claridad en sus procesos migratorios y de acceso al refugio, y por recibir comida en descomposición.