El Hospital de Especialidades Pediátricas del Instituto Mexicano del Seguro Social-Bienestar (HEP-IMSS-Bienestar) instaló el Subcomité de Control de Antimicrobianos con la participación de diversos especialistas.
El subcomité busca fortalecer el uso responsable de los antimicrobianos para mejorar la atención y combatir la resistencia bacteriana.
En 2023, la Secretaría de Salud (Ssa) dio un primer paso con la conformación de un grupo de expertos profesionales de la salud de distintas áreas y niveles con la encomienda de generar un consenso sobre los diagnósticos y tratamientos con antibióticos más eficaces.
Con el objetivo de atender las enfermedades de transmisión sexual, infecciones diarreicas agudas, infecciones respiratorias agudas e infecciones de vías urinarias en el primer nivel de atención.
Para llegar a dicho consenso, se realizaron múltiples sesiones de trabajo con los expertos utilizando la metodología Delphi Modificado.
Con las recomendaciones de tratamiento médico producto del consenso, se obtuvieron los algoritmos para desarrollar la aplicación virtual llamada RAMApp, herramienta construida por el acuerdo cooperativo sobre RAM en el primer nivel de atención de la Ssa-Fundación México Estados Unidos para la Ciencia (Fumec) y los Centros para el Control de Enfermedades (CDC) en Estados Unidos.
También fungieron como la base científica para los cursos para profesionales de la salud sobre RAM impartido en conjunción con el Sistema Educativo de Salud para el Bienestar (Siesabi).
Cabe señalar, la resistencia antimicrobiana se produce cuando los microorganismos (bacterias, hongos, virus y parásitos) sufren cambios evolutivos capaces presentar nuevos mecanismos que potencialmente confieren resistencia a los medicamentos administrados; dichos cambios pueden ocurrir de manera natural; sin embargo, la utilización continua de antimicrobianos conlleva a la selección de los microorganismos mejor adaptados, es decir, los más resistentes.
La resistencia bacteriana es considerada una amenaza para la salud pública en México y en el mundo, ya que incrementa el riesgo de propagación de enfermedades infecciosas, además de la prolongación de las mismas, poniendo en riesgo procedimientos quirúrgicos fundamentales como cesáreas o los implantes óseos de prótesis, así como tratamientos que deprimen el sistema inmunológico, como la quimioterapia contra el cáncer.