Ante el inicio de la guerra entre los países de Rusia y Ucrania, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) emitió un comunicado fijando su postura al respecto. El propio papa Francisco ha establecido contacto con el embajador de Rusia en el Vaticano, para expresar su preocupación por Ucrania.
El conflicto armado entre los dos países inició el pasado jueves, lo que originó la preocupación de la Iglesia católica, por lo que los integrantes de la CEM expusieron: “Ante estos últimos acontecimientos que han roto el frágil equilibrio de la paz en el mundo con la agresión bélica que sufre el pueblo de Ucrania de parte de las operaciones militares rusas, el Episcopado Mexicano se une al clamor del papa Francisco que nos recuerda que Dios, es Dios de la paz, no de la guerra; que es padre de todos, no sólo de algunos, que nos quiere hermanos y no enemigos, siendo esto una realidad que vale para todo el mundo, con mayor urgencia donde ha brotado el conflicto y la violencia”.
Además se sumaron a la postura de la diplomacia vaticana, la cual expresó: “Aún hay tiempo para la buena voluntad, aún hay espacio para la negociación, aún hay lugar para el ejercicio de una sabiduría... que evite al mundo la locura y los horrores de la guerra”.
Por lo anterior, invitaron las comunidades católicas en México, siguiendo la iniciativa del papa Francisco, a unirse en oración y ayuno el próximo Miércoles de Ceniza.
Al tiempo que aconsejaron que se puede pedir “al Príncipe de la Paz, nuestro Señor Jesucristo, por el cese de las hostilidades en Ucrania”.
De igual manera que pidieron que al término de la eucaristía del domingo 27 de febrero, se dé la bendición solemne con el Santísimo Sacramento del Altar, confiando en la intercesión de santa María de Guadalupe para que en México y en el mundo prevalezca siempre la paz.