La brecha digital dificulta la educación

Ningún estado del país está preparado para el cierre de las escuelas porque no se puede garantizar clases a distancia, siguiendo las indicaciones sanitarias, ante las limitaciones a las que se enfrentan, tanto sanitarias, como la clase social, la etnia, el género, o la ubicación geográfica, situaciones que originan una brecha digital.

Lo anterior, lo manifestó María de los Ángeles Gordillo Castañeda, directora de Educación Media y Superior, durante el Primer Foro Internacional “La Educación Virtual y las Universidades Interculturales en tiempos de Pandemia”, organizado por la Universidad Intercultural de Chiapas (Unich).

Desigualdades sociales

Dijo que hay múltiples desigualdades sociales que históricamente han vivido los pueblos, sobre todo los indígenas, las cuales han llevado a que actualmente en muchas comunidades no exista la posibilidad de acercarse a las herramientas de la información.

Se debe tomar en cuenta que las nuevas generaciones de estudiantes están vinculadas con las tecnologías digitales, aunque no necesariamente las emplean como un recurso para la educación. Ese es el nuevo reto del sistema educativo y pedagógico.

La primera ponencia titulada “El modelo de la educación intercultural y los retos de la educación virtual”, estuvo a cargo de Benito Ramírez Valverde, maestro en Estudios Latinoamericanos y Ciencias en Estadística, miembro de la Academia Mexicana de Ciencias.

Indicadores de pobreza

A manera de contexto indicó que de acuerdo a la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en Latinoamérica el 30 por ciento de la población vive en situación de pobreza y el 10 por ciento en pobreza extrema.

Las zonas rurales son las más afectadas por estas condiciones.

De acuerdo al Banco Mundial, en América Latina existen alrededor de 400 pueblos originarios, los cuales han sido excluidos provocando que el 65.5 por ciento de su población se encuentre viviendo en la pobreza.

En México en 2018 este indicador se registró en el 41.5 por ciento de la población.

En una década, de acuerdo con cifras oficiales, la población en situación de pobreza incrementó pasando de 44.4 por ciento, casi 50 millones de personas, en el 2008, a 41.9 por ciento, 52.4 millones de personas, en 2018.

De acuerdo al Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) alrededor de 12 millones de personas viven en pueblos indígenas, más del 10 por ciento de la población del país; lugares que viven en condiciones más severas de pobreza que el resto del territorio.

En el 2008, el 71.1 por ciento de la población indígena estaba en condiciones de pobreza contra el 41.5 por ciento de la no indígena; mientras que 10 años después los indicadores se mantienen en cifras similares.

Refirió que si nuestro sistema educativo fuera equitativo debería haber un 10 por ciento de indígenas en educación media superior, el que no sea así es indicativo de un racismo estructural y de la desigualdad educativa del sistema mexicano.

“Se trata de que la presencia de indígenas se incrementa de forma notable en todos los niveles educativos”, afirmó el Inegi.

Sólo dos por ciento de jóvenes indígenas entran a una universidad, pero solamente la quinta parte de ellos puede concluir sus estudios, por lo que únicamente el uno por ciento de los estudiantes en las universidades es indígena.

Esa inequidad planteó una nueva alternativa que fue la creación de las universidades interculturales, con un modelo educativo totalmente diferente que combine el conocimiento científico y tradicional, y no sólo para beneficiar a jóvenes indígenas.

A menos de dos décadas han tenido un importante avance en términos de sus programas educativos, por la posibilidad que ofrecen de que los jóvenes indígenas puedan estudiar, y desarrollar sus actividades en sus propias comunidades.

Por otra parte, Jorge Luis Zuart Macías, rector de la Universidad Intercultural de Chiapas, dijo que es innegable que no todos los estudiantes, profesores y trabajadores cuentan con los recursos tecnológicos que les permitan llevar a cabo sus actividades de enseñanza-aprendizaje y labores administrativas a distancia.

El foro busca plantear la difusión bajo las siguientes líneas de trabajo: analizar los problemas actuales de la educación virtual con el reto que supone el modelo educativo de las universidades interculturales; valorar las experiencias vividas en estas circunstancias de emergencia por parte de la comunidad academia y estudiantil; diseñar y compartir propuestas de trabajo.

Asimismo, se pretende compartir experiencias de estudiantes en comunidades indígenas y las dificultades que están afrontando, para salir adelante en una situación que se ha convertido en el futuro; que los docentes expongan como han cumplido con sus obligaciones académicas.